La carrera de Oscar Pistorius

Oscar Pistorius es uno de los atletas más reconocibles del mundo y la cara de atletas discapacitados que buscan oportunidades iguales con base en su talento. Pistorius es también una figura envuelta en controversia y un juicio por asesinato. Aquí te presentamos una retrospectiva de su carrera deportiva.

Pistorius nació el 22 de noviembre de 1986 en Johannesburgo, Sudáfrica. Un caso de Hemimelia peronea, (ausencia congénita del peroné) llevo a la amputación de sus dos piernas por debajo de la rodilla a los 11 meses de edad. Sin embargo, la adversidad no apagó la ambición y pasión deportiva del corredor.

El sudafricano compitió en todo tipo de deportes incluyendo Rugby y lucha grecorromana. Sin embargo, a los 18 años y tras una lesión de rodilla, Pistorius probó la pista de carreras.

A pesar de calificar para competir en la categoría de dos amputaciones por debajo de la rodilla, Pistorius tuvo el nivel para competir con corredores con una sola amputación.

Los juegos paralímpicos de Atenas fueron la primera sede de los éxitos del corredor, que se llevó el oro en los 200m y el bronce en los 400m, comenzando un paso de dominio sin igual entre los velocistas paralímpicos.

Para 2005, Pistorius tenía ya la mira en las competencias sin discapacidades. El corredor compitió en carreras nacionales y un par de años después debutó en los 400m en Roma compitiendo con corredores con ambas piernas.

Con la intención de clasificar a Beijing 2008, Pistorius, a sus 22 años, comenzó a perseguir la marca mínima para la competencia. Sin embargo, el joven no consiguió las 45.55 segundos necesarios y tampoco fue elegible para los relevos. El sueño tendría que esperar cuatro años.

Mientras tanto, Pistorius no soltó su dominio sobre las competencias paralímpicas, ganando el oro en 100m, 200m y 400m en China.

En 2011, con algunos años de preparación, Pistorius consiguió una marca de 45.97 que lo clasificó para los 400m en Londres 2012.

Su siguiente desafío fueron los campeonatos mundiales en Daegu, Corea del Sur, donde clasificó a semifinales en su prueba predilecta, los 400m. Además corrió en el relevo de dicha distancia, si bien fue marginado de la final por su "lento" tiempo en la primera fase.

El equipo sudafricano consiguió la medalla de plata en la competencia y, al haber corrido en las fases preliminares, Pistorius se hizo acreedor a una medalla, convirtiéndose en el primer corredor discapacitado en conseguir una medalla en competencias sin discapacidades.

Los juegos de Londres fueron la vindicación deportiva para Pistorius, que por fin pudo competir en la máxima justa deportiva.

Una vez más, la experiencia del corredor terminó en las semifinales, terminando octavo en su "heat", dejando así las pistas de Londres de manera individual.

Pistorius debutó en los relevos en la final del 4x400m, en el que su equipo terminó en el penúltimo lugar. A pesar de eso, su aparición fue exitosa y envió un mensaje sobre los deportistas con capacidades diferentes.

Pistorius fue elegido para cargar la bandera de su país en la ceremonia de clausura de 2012, un punto culminante en su carrera.

Poco después, Pistorius estaría de vuelta con la bandera para los paralímpicos, liderando a la delegación sudafricana.

Si bien su actuación no fue tan dominante como en ocasiones anteriores, Pistorius se llevó tres medallas, dos de ellas de oro, en lo que sería su última competencia mayor.

Pistorius se colocó como uno de los deportistas más inspiradores e icónicos, compitiendo contra todas las probabilidades para conseguir medallas en eventos con y sin discapacidades.

El corredor dejó clara su ética de competencia con un tatuaje en la espalda de un pasaje bíblico (COR 9:26) que comienza: Por tanto, yo de esta manera corro, no como sin tener meta

Durante su carrera deportiva se cuestionó si las prótesis que utiliza le proporcionaban una ventaja competitiva sobre quien corre sobre tobillos comunes.

Estudios iniciales determinaron que gracias a sus prótesis, Pistorius gastaba menos energía para alcanzar la misma velocidad que un competidor sin discapacidad.

En su momento, la IAAF determinó que sus prótesis lo hacían inelegible para competencias. En su momento, esto derminó su ausencia de los juegos de Beijing.

Sin embargo, Pistorius demostró exitosamente que las ventajas que recibía en algunos aspectos de la competencia se compensaban con desventajas en momentos como el arranque y la aceleración. Así, el sudafricano legitimó su calidad en la competencia deportiva.

Pistorius se hizo acreedor del respeto de la comunidad deportiva y más allá, pero su historia de éxito se derrumbaría poco después.

El 14 de febrero de 2003, Pistorius habría matado a su novia Reeva Steenkamp.

Su juicio decidirá cómo se recordará a este gran deportista, si bien el solo hecho puede haber afectado su reputación para siempre.