Mick, el hijo de Michael Schumacher, 'hombre récord' de la Fórmula Uno, cuya plusmarca de 'poles' (68) igualó el sábado el inglés Lewis Hamilton (Mercedes), homenajeó a su padre este domingo en los instantes previos al Gran Premio de Bélgica, el duodécimo del Mundial, pilotando el monoplaza de 1994 con el que el 'Kaiser' ganó el primero de sus siete títulos.
El hijo de Schumacher rinde homenaje a su papá en el GP de Bélgica
Mick, hijo del 'Kaiser', realizó una vuelta en el circuito dela F-1 arriba del monoplaza que usó su padre en 1994.
Con motivo del vigésimo quinto aniversario del primero de los 91 triunfos que logró en la categoría reina Schumacher, precisamente en el circuito de Spa-Francorchamps, Mick, de 18 años, que compite en la F3 Europea, giró en la mítica pista de las Árdenas con el Benetton Ford B 194 con el que dos años después de ese triunfo, en 1994, su padre capturó su primer Mundial de F1.
Francorchamps está ligada de forma indisoluble al nombre de Michael Schumacher, convaleciente aún del gravísimo accidente de esquí que sufrió el 29 de diciembre de 2013 en Meribel, en los Alpes franceses: en esta pista, en la que debutó en 1991 y logró su primera victoria una temporada después, nadie iguala sus seis triunfos.
El 'Kaiser' logró el segundo de ellos en 1995, el de su segundo título con la Benetton del italiano Flavio Briatore -'descubridor' también, para la categoría reina, del doble campeón mundial español Fernando Alonso-, antes de fichar por la escudería Ferrari, con la la que consiguió sus otros cinco Mundiales.
Schumacher ganó de nuevo en Spa-Francorchamps con el coche rojo en 1996 y 1997 y volvió a hacerlo una vez más en 2001, cuando logró su triunfo 52 en F1, que mejoraba el anterior récord, del francés Alain Prost (que en estos momentos detenta la tercera marca histórica, por detrás de Hamilton).
Una plusmarca que 'Schumi' convirtió en superlativa tras sumarle otros cuarenta triunfos, entre ellos el sexto que logró en Bélgica en 2002. Dos años antes de firmar en la legendaria pista de las Árdenas de forma matemática su séptimo título mundial.
Este domingo su hijo Mick lo homenajeó en una pista en la que el sábado Hamilton -triple campeón del mundo y segundo en el Mundial 2017, a catorce puntos del alemán Sebastian Vettel (Ferrari), cuádruple ganador del certamen- igualó uno de sus muchos récords: el de 'poles' (68).
Schumacher jr., que rodó con el monoplaza con el número 5 que ese día llevaba su padre, fue recibido en meta por los ingleses Pat Symonds, que en aquel entonces era el ingeniero de pista de su progenitor; y Ross Brawn, vinculado a todos los éxitos del 'Kaiser', tanto en Benetton, como en Ferrari.
Mick, que saludó al público después de hacerle una reverencia al primer monoplaza triunfal de su padre, había rodado en este circuito hace un mes, con la Fórmula 3. Tras hacerlo este domingo con el Benetton Ford de 1994, indicó que "las sensaciones" eran "completamente distintas" al tratarse de "dos coches muy diferentes".
Posteriormente, el locutor le despidió indicando que lo espera ver "dentro de unos años en la Fórmula Uno", a lo cuál Mick Schumacher, fuertemente ovacionado por el numeroso público presente este domingo en Spa-Francorchamps, el circuito talismán de su padre, respondió con un escueto "ojalá".