OPINIÓN | “Cubo” Torres tiene la mayúscula obligación de ser el goleador del Dynamo

Houston Dynamo sacó un triunfo de 1-0 sobre San Jose Earthquakes en su segundo encuentro de preparación. El gol de los naranjas lo convirtió Erick “Cubo” Torres por la vía de la pena máxima.

Aún es temprano en la pretemporada para poder decir que el “Cubo” esta aceitado para la campaña 2016, pero tras un difícil 2015 a nivel de clubes, cualquier gol es bienvenido para comenzar a dejar la sequía atrás y enracharse positivamente. Algo que le urge a Torres, quien atraviesa su racha más oscura desde su arribo a la MLS.

Cuando Torres llegó a la liga en el verano del 2013, tuvo un rápido impacto positivo para Chivas USA. Esa confianza y efectividad frente al arco la trasladó al 2014, donde marco 15 goles, de los cuales varios fueron de un alto grado de dificultad.

Prueba de que el goleador mexicano no sufrió de dos males comunes: la adaptación y que aun cuando los rivales ya sabían de su capacidad y podían estudiarlo más, no lo podían detener.

Pero en 2015, varios factores tanto a nivel cancha como fuera de ella, mermaron considerablemente su rendimiento. Nunca pudo encontrar el ritmo, ni la confianza o los minutos y peor aún, su mejor amigo – el gol – lo abandono.

Sin embargo, Torres ya no tiene tiempo de reflexionar en lo sucedido el año pasado; tiene que sacudírselo lo antes posible a base de goles y llenar las expectativas con las que carga.

El mexicano se ganó a pulso la responsabilidad de ser el jugador referente, por eso tiene la etiqueta de Jugador Franquicia. Y es por eso mismo que ya no habrá un mañana: tiene que explotar este año o esa etiqueta no durara mucho tiempo y además, de eso depende en gran parte su participación como el centro delantero de la Sub-23 de México en los Juegos Olímpicos de este verano.

La redención del “Cubo” depende totalmente de sí mismo, de mandar la pelota a la red constantemente. Puedo sonar algo exigente, pero las cualidades las tiene y de que puede ser un goleador importante en la MLS, también ya lo demostró. Las expectativas ya no se pueden bajar, están ahí por su rendimiento, y esos son los parámetros bajo los que se le debe exigir.

Después de todo, estamos hablando del rompe redes azteca que más goles ha marcado en la MLS, dejando a sus históricos compatriotas como el mismísimo Hugo Sánchez, Cuauhtémoc Blanco, Luis Hernández, Carlos Hermosillo, entre otros, por debajo de su record que logró en tan solo una campaña y media con un club muy modesto.

A diferencia de lo que tenía en el "Rebaño angelino", en Dynamo es parte de un equipo importante: el "Cubo" puede colgarse de varios recursos para llegar al gol. Tiene a un DaMarcus Beasley, un jugador que puede desbordar y centrarle, un Boniek García que le puede filtrar un pase, un Mauro Manotas o un Leonel Miranda con el que se puede combinar; ni hablar de la llegada de Cristian Maidana...

Además, todo el peso del ataque no debiera caer sólo sobre él: podría incluso hacer una dupla muy temida con el jamaiquino Giles Barnes.

Entiendo que la vida del goleador es así, de rachas, de andar tan fino que hasta sin querer la meten, o tan errado que ni al arcoíris le meten un gol. Pero lo que separa a los goleadores importantes de los del montón, es encontrarse con la racha de goles en los momentos adecuados. El 2016 es ese momento para Torres.