Zacatepec gana pero Venados de Mérida avanza a Semifinales del Ascenso MX

Esa pizca de azúcar para endulzar el pastel entero, con todo y cereza. Ese toque final, el último soplido o la última caña para completar la mejor de las zafras. El Zacatepec tuvo tiempo de sobra para redondear una obra que parecía más una hazaña, para endulzar su tarde y, mejor aún, su temporada, pero el polvo se escurrió de sus manos.

El Atlético Zacatepec venció 1-0 a Venados, pero el conjunto de Mérida se llevó el pase a Semifinales del Torneo Clausura 2019 del Ascenso MX tras quedarse con el global de 2-1 a pesar de verse en desventaja desde muy temprano en el Estadio Agustín “Coruco” Díaz.

Como si se ofreciesen para un banquete con carne de venado, a los morelenses les faltaba lo básico para cazar a su presa, pero Luis Sánchez otorgó el arco y hasta la flecha para meter a su equipo en aprietos en un pésimo rechazo dentro de su área chica que César Huerta aprovechó para rematar frente al marco cuando apenas los jugadores se sacudían las lagañas y despertaban al encuentro.

Con solo poco más de un minuto transcurrido, el Zacatepec se ponía adelante en el marcador y tenía todo un mundo para lograr el tanto del milagro, el de la clasificación. Giovani Hernández lo buscó por derecha o izquierda, Cardozo insistía en el centro, pero la puntería para volver a cazar al venado no aparecía por inspiración espontánea.

Armando Navarrete sobresalió en medio del mar de imprecisión. El guardameta contuvo bien los centros peligrosos que sacaban del aburrimiento a los aficionados que llegaron al “Coruco” Díaz con una ilusión tan fuerte como inquietante y que se marchitaba con cada error de Salinas en medio campo, con cada tiro infructuoso de Fergonzi desde fuera del área, o con cada decisión equivocada del propio Huerta, carente de olfato para ceder el esférico a un compañero en mejor posición para anotar al menos en un par de ocasiones.

¿Qué es lo más temido en una Liguilla? ¿Cuál es el enemigo número 1 en una Fase Final? A veces el tiempo, pero casi siempre, la desesperación. En el complemento y, con el paso de los minutos, era cada vez más difícil disimular la impaciencia en las piernas morelenses y la templanza en los tacos yucatecos.

Tamay y Uscanga sacaron su experiencia para intentar frenar en seco los intentos de Rodolfo Salinas por subir y por cambiar de banda constantemente hasta que Ricardo Valiño, obligado a hacer dos cambios por lesión, optó por el ingreso de Rodrigo Prieto.

Sergio Orduña, también ahogado por sus modificaciones, respondió con Víctor Lojero para que, ahora sí, las piezas fueran movidas y solamente la suerte, el milagroso remate, o el temido error definieran todo.

En la capital cañera se presentó un ambiente caluroso que alcanzó los 38 grados Celsius y no significaban nada con la temperatura a nivel de cancha en el “Coruco”. Zacatepec sacó la enjundia en los últimos minutos e hizo lo que debió hacer mucho tiempo atrás. Sofocó con desbordes de Giovani, acribilló el aspecto físico con Cortez e incomodó cualquier intento de salida de Venados más allá de media cancha. El dramatismo por fin apareció en la compensación, pero el toque fino nunca llegó, Navarrete pasó más tiempo tirado en el césped que de pie para consumir los últimos instantes y, con ellos, la vida de los locales en el Clausura 2019.

Los Venados se llevaron el azúcar de la selva cañera, aunque deberán evitar el empacho de dulce para las Semifinales, donde encararán nada más y nada menos que al Atlético de San Luis, Campeón y líder del Ascenso MX.