Con un gran Kawhi Leonard, los Raptors vencen a los Warriors y quedan a un triunfo del título

Los Toronto Raptors volvieron a dar la sorpresa en casa de los Golden State Warriors y se llevaron la victoria en el Juego 4 de las Finales de la NBA con un marcador de 105-92, con lo cual el equipo canadiense quedó a un solo triunfo de conseguir el primer título en la historia de la franquicia.

Los Warriors, como hace mucho tiempo, no necesitaban tanto de una victoria, pues una derrota en este encuentro los dejaría con la obligación de ganar tres partidos en fila, dos de ellos en campo de los Raptors.

Si en el Juego 3 Stephen Curry, que anotó 47 puntos en dicho partido que terminaron perdiendo los Warriors 123-109, no recibió ayuda, esta vez sí que tuvo apoyo de sus compañeros, especialmente de los dos jugadores que estuvieron ausentes en dicho choque, Klay Thompson y Kevon Looney, quienes se recuperaron sus respectivas lesiones.

Thompson lideró a los locales con 28 puntos, Curry logró 27 y Looney aportó 10 unidades, pero el resto del equipo no respondió en la ofensiva que volvió a echar de menos a Kevin Durant.

Eso sí, hay que tener en cuenta que Draymond Green rozó el triple doble, logrando nueve rebotes, 12 asitencias y 10 puntos.

Por el contrario, Toronto tuvo en Kawhi Leonard a su gran figura, con 36 puntos, 12 rebotes y dos asistencias, demostrando todo su valor y siendo de momento el principal candidato a llevarse el premio MVP de estas Finales.

Además Golden State, un equipo acostumbrado anotar más de 110 puntos por partido en la temporada regular, se encontró con la férrea de los Raptors, encabezada por el mismo Leonard y por Marc Gasol, quienes han sido ganadores del premio a Mejor Defensivo del Año en el NBA en el pasado.

Otro jugador vital para los Raptors hoy fue Serge Ibaka, un gran defensa y quien además sumó 20 puntos, su cifra máxima en estas Finales. por si fuera poco Paskal Siakum logró 19 puntos y cinco rebotes y Kyle Lawry aportó otros 10, dejando claro que son un equipo muy profundo.

Ahora, tras la derrota en el que bien pudo ser el último partido en el Oracle Arena, los Warriors quedaron sin margen de error y tendrán que ganar tres partidos consecutivos para remontar el 3-1 en contra, algo que solamente han podido lograr los Cleveland Cavaliers justamente hace tres años ante Golden State.