José Altuve

    ¿Cuánto mide José Altuve vs. Yeferson Soteldo? La diferencia de estatura de los jugadores de MLB y MLS

    José Altuve vs. Yeferson Soteldo, dos venezolanos que brillan en MLB y MLS.

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    Por:
    Mark Cube.


    Video La experiencia, clave para los Astros en la Serie Mundial
    José Altuve y Carlos Correa hablaron en el día previo al arranque del duelo ante Washington.
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    2:02 mins

    Antes había una creencia general que decía que pelotero bajito que conectaba un fly era un out por regla. Había prejuicios con los beisbolistas que no midieran más de 1.70 mts, pues una buena estatura siempre ha sido creída como una vara importante a la hora de medir el rendimiento posterior de un deportista. En el beísbol y en el futbol José Altuve vs. Yeferson Soteldo han roto paradigmas.

    Así como en su momento llegó Jackie Robinson para asentar en MLB a los jugadores afroamericana antes vinieron otros, que no pudieron estar por el racismo y migraron a las ligas negras, así ha pasado con los hombres bajos.

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    Chone Figgins, Rafael Furcal, Ray Durham, Marcus Stroman, Dave Eckstein, todos ellos han dejado marca en Grandes Ligas gracias a su velocidad, por algo dicen que la estatura ayuda mucho a la habilidad, por su buena defensa Furcal fue uno de los mejores infielders de la Gran Carpa estando con los Bravos de Atlanta, Durham, Eckstein fue clave para la Serie Mundial de 2002 de los Angelinos de Anaheim, etc y buen pitcheo (Stroman) que han acabado con el ideario de que los que no midan de 1.80 para arriba no pueden triunfar en MLB.

    ¿Cuánto mide José Altuve?


    Cuando ese diminuto hombre (mide 1.68mts / 5.51 pies) salió de Maracay (se crió en Puerto Cabello, Carabobo, en Venezuela) todos los scouts le auguraron fracaso. “Es muy bajito”, “no va a poder sostenerse en el profesionalismo”, “es muy frágil”. Pero hubo uno, de gran recorrido y reconocimiento en Venezuela, que detuvo ese adalid de fatalismos: Alfredo Pedrique.


    Pedrique, quien tiene experiencia como mánager de los Cascabeles de Arizona y ha pasado por equipos como los Atléticos de Oakland, los propios Astros de Houston y ahora los Marlins de Miami, fue quien confió en José Altuve.

    Quizás por intuición, por lo que veía, porque fácilmente podía dar por hecho que no podría lograr sus metas debido a su condición. En más de una oportunidad ha dicho Pedrique que lo que le encandiló de Altuve fue su velocidad en el swing, más allá de que le dijo a la gerencia de los Astros en 2007 que era muy pequeño.

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    Cuando se vio por primera vez con él le preguntó si sabía jugar a la pelota y las palabras, lapidarias por cierto, de Altuve aún retumban en la cabeza del dirigente: “Te lo voy a demostrar”. Así fue y firmó un bono de 15.000 dólares que le ataron a los siderales para empezar a forjar su carrera en Estados Unidos.

    La confianza depositada en él fue importantísima, pues si no hubiese tenido en su camino a alguien que apostara por su talento, a un mentor, quizás no hubiese llegado a lo que es hoy: un tipo con tres títulos de bateo, que acumula ya un Más Valioso, un anillo de Serie Mundial, y cuatro temporadas con 200 o más incogibles en 10 años en el Big Show. Un fuera de serie que por poco el béisbol se perdió de disfrutar por meros supuestos.

    Soteldo y el paralelismo con el futbol


    No solamente ocurre en el béisbol que hay escepticismos por lo que indica la cinta métrica, también pasa en el futbol. Yeferson Soteldo es hoy noticia en Venezuela por haber salido del Santos de Brasil para recalar en el Toronto FC de la Major League Soccer. Se dice rápido, pero haber portado la mítica playera 10 de “O Rei Pelé”, es todo un lujo para un venezolano y Soteldo puede decir que lo hizo.

    La idolatría que la fanaticada del Peixe tiene hacia él no es por condescendencias: su regate, su velocidad, su desborde, la capacidad para generar espacios y su liderazgo quedó patentado en Villa Belmiro, por lo que hay que también enfatizar en él.


    Soteldo nació en Acarigua, en parte de los llanos venezolanos. Cuando cumplió 13 años fue ojeado para que formara parte del profesionalismo y así fue cuando recaló en el Caracas FC. Allá no pudo seguir porque decían que tenía problemas de conducta y la vida, por primera vez, le ponía trabas a lo que aspiraba a llegar a ser. Su sueño de ser futbolista, de mostrar esos dotes que le caracterizaban siendo un niño, parecía estancarse. Hasta que, como en el caso de José Altuve, se le apareció ese ángel guardián que apostó a su talento y le abrió las puertas del éxito: Noel Sanvicente.

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    “Chita” lo vio en una convocatoria de selección regional y lo llevó a Zamora, donde empezó siendo un recogepelotas. En el equipo de Barinas debutó con 16 años y se convirtió en uno de los talentos más grandes surgidos en el futbol venezolano.

    Su progresión llegó hasta la Vinotinto cuando fue subcampeón del mundo en Corea en 2017 y después llegaría la oportunidad de Huachipato de Chile, donde llamó la atención de Jorge Sampaoli y el Santos.

    ¿Cuánto mideo Yeferson Soteldo?


    Un meteórico ascenso que lo llevó a ser el futbolista que hoy llega a la liga MLS de los Estados Unidos, aún y cuando su estatura marque 1.60 mts / 5'25 pies, más bajito que Leo Messi (5'7), su gran ídolo y ocho centímetros menos que su paisano del béisbol.

    Soteldo y los más bajitos de la MLS


    Darwin Quintero en Minnesota con sus 1.67, Ezequiel Barco con el Atlanta United con sus 1.67 también, Joshua Pérez con Los Ángeles FC con 1.65, en su momento el italiano Sebastián Giovinco con Toronto FC también con el 1.64, han sido algunos de los futbolistas más bajitos que han estado en la Major League Soccer.

    Cada uno de ellos ha destacado por su baja estatura, pero también por su calidad. El argentino Barco es uno de los mejores jugadores de Estados Unidos, Giovinco tuvo un cartel destacado por su paso en Europa con la Juventus y Pérez es clave en LAFC.

    Soteldo viene a una tierra donde los bajitos se han ido abriendo paso y que promete seguir dejando para la posteridad goles, regates y un espectáculo digno del país que mejor sabe valorar eso como show deportivo.

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