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    Padre se aterra que su hijo sea fan del odiado rival, ¿la solución? ¡Buscar un hipnotista!

    Un hombre publicó en un sitio inglés que está dispuesto a pagar cerca de cuatro mil dólares para que su hijo de seis años sea ‘tratado’ y cambie al Tottenham por el Arsenal.

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    Por:
    Víctor Severino.


    Video Padre se aterra que su hijo sea fan del odiado rival, ¿la solución? ¡Buscar un hipnotista!
    Un hombre publicó en un sitio inglés que está dispuesto a pagar cerca de cuatro mil dólares para que su hijo de seis años sea ‘tratado’ y cambie al Tottenham por el Arsenal.
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    2:00 mins

    El peor terror de un padre futbolero se ha cumplido: que su hijo sea fiel aficionado de la escuadra a la que más odia. Un rubro que no es de total extrañeza, pero sí lo es la forma en la que los progenitores lo encaran y, por lo menos en Londres, hay un hombre que está dispuesto a pagar cerca de cuatro mil dólares a un hipnotista para intentar que su hijo de seis años deje de ser aficionado del Tottenham y se cambie al Arsenal.

    Este padre es fiel aficionado a los Gunners y al fútbol, tanto que se llevó a su pequeño vástago al Mundial de Rusia 2018 en donde compartieron el andar de la selección inglesa, fue allí donde el destino le giró de forma inesperada. Harry Kane se volvió el baluarte y goleador del equipo, por ello, su hijo lo empezó a seguir a detalle, a tal grado que se ha proclamado aficionado a los Spurs.

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    Su extraña solución fue publicar un anuncio en el sitio bark.com: “Vi un vídeo hace un año de un hipnotizador que hacía que un fan del Arsenal y otro del Tottenham animaran a su equipo rival y quiero hacer lo mismo con mi hijo. Recientemente he tenido un bono en el trabajo y estoy dispuesto a pagar tres mil libras (tres mil 900 dólares) para quien pueda lograrlo. Sé que es un poco extraño, pero quiero disfrutar los fines de semana viendo fútbol y compartiendo momentos con mi hijo”.

    Eso sí, dejo en claro que la publicación del anuncio la hizo sin el conocimiento ni consentimiento de su esposa, así que a ver cómo le va a este peculiar aficionado con las elecciones de su hijo de seis años: “Esto parece algo exagerado y sé que no es lo ideal”. En casa seguro se lo harán notar.

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