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    Copa Del Rey

    Las claves que definieron la Final de la Copa del Rey entre Barcelona y Sevilla

    La Final de la Copa del Rey que se vivió en el estadio Vicente Calderón entre el Barcelona y el Sevilla tuvo momentos que fueron clave en el partido.

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    La Final de la Copa del Rey se vivió en el estadio Vicente Calderón.

    Imagen Getty Images
    La Final de la Copa del Rey se vivió en el estadio Vicente Calderón.

    MÉXICO.- La Final de la Copa del Rey que se vivió en el estadio Vicente Calderón entre el Barcelona, Campeón de la Liga española, y el Sevilla, Campeón de la Liga Europa, tuvo momentos que fueron clave en el partido para ambos equipos que llegaban en uno de sus mejores niveles futbolísticos.

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    El primero de ellos fue el mal inicio del Barcelona, donde el tridente ofensivo de Neymar, Messi y Suárez, no estuvo fino, motivo por el cual dejaron escapar varias ocasiones de gol.

    El segundo fue la falta que cometió Maschearon sobre Gameiro, quien le jaló la playera para evitar que llegara en un mano a mano contra Ter Stegen, motivo por el cual dejó al Barcelona con 10 hombres en el terreno de juego.

    Ante la superioridad numérica del Sevilla, el equipo intentó aprovecharse de la situación y buscó marcar la diferencia en el marcador, aunque no pudieron abatir a Piqué ni a Ter Stegen.

    A pesar de que el delantero Uruguayo, Luis Suárez, tuvo que abandonar el terreno de juego por una lesión, su cambio al minuto 56 por Rafinha le dio más empuje al equipo Blaugrana, donde pasó por sus pies el balón en la jugada del segundo gol catalán.

    Aunque el Sevilla tuvo superioridad numérica casi todo el tiempo, utilizó el recurso de realizar faltas estratégicas para frenar al Barcelona, siendo al minuto 90 cuando el jugador argentino, Ever Banega, tuvo que barrese en una jugada para frenar a Neymar después de un excelente pase de Messi, por lo que el mediocampista tuvo que irse a las regaderas en los minutos finales del tiempo regular para dejar a ambos equipos con sólo 10 jugadores.

    El cancerbero del Sevilla fue un muro durante el tiempo regular del partido, deteniendo todos los ataques blaugranas, aunque para su mala fortuna, la magia de Iniesta y la genialidad de Messi fueron superiores para marcar la diferencia en la prórroga de la Final de la Copa del Rey.

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