La australiana Kim Brennan conquistó el oro en el skiff femenino
La estadounidense Genevra Stone se llevó la plata, mientras que la china Jingli Duan se quedó con el bronce.
Por:
TUDN
Imagen Getty Images
La australiana Kim Brennan, que fue bronce en Londres 2012 y campeona mundial en 2013 y 2015, confirmó su favoritismo con el oro en skiff femenino en las pruebas de remo de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
RÍO DE JANEIRO, Brasil - La australiana Kim Brennan, que fue bronce en Londres 2012 y campeona mundial en 2013 y 2015, confirmó su favoritismo con el oro en skiff femenino en las pruebas de remo de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
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La australiana, que ya había dejado clara su condición de favorita con oros en las dos regatas de la Copa del Mundo que disputó este año, recorrió los 2.000 metros en la Lagoa Rodrigo de Freitas en un tiempo de 7:21.54 tras haber atravesado en primer lugar todos los parciales.
La estadounidense Genevra Stone, que estuvo en diferentes podios de la Copa del Mundo de este año pero no figuraba entre las favoritas, se quedó con la plata con un tiempo de 7:22.92, y la china Jingli Duan, que se coló sorprendentemente en la final, obtuvo el bronce con 7:24.13.
La neozelandesa Emma Twigg, cuarta en Londres y campeona mundial en 2014, consiguió nuevamente el cuarto lugar tras haberse retirado de las competiciones el año pasado y tan sólo retomado los remos este año.
La quinta fue la suiza Jeannine Gmelin y la sexta la austríaca Magdalena Lobnig, campeona europea.
La gran ausente en la final del skiff femenino fue la bielorrusa Ekaterina Karsten, dos veces campeona olímpica y que a sus 44 años disputó sus séptimos Juegos Olímpicos, en los que quedó en la octava posición en la general.
Las regatas de remo olímpico se disputaron desde el sábado 6 de agosto y hasta hoy en la Lagoa Rodrigo de Freitas, una laguna exprimida entre la playa de Ipanema y el Jardín Botánico de Río de Janeiro cuyas polémicas aguas aún generan temor entre algunos competidores por su contaminación, aunque el COI garantiza que los controles indican que están en los niveles aceptados por las autoridades sanitarias.
