Juegos Olímpicos

    Speedo, Ralph Lauren y otras dos marcas retiran su patrocinio a Ryan Lochte tras escándalo en Río

    La marca de trajes de baño agregó que donará una porción de los 50,000 dólares que le pagaba a Lochte a la organización caritativa 'Save the Children'. Ya son cuatro compañías que cancelan los acuerdos con el atleta.

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    Por:
    TUDN

    Ryan Lochte, en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

    Imagen AP
    Ryan Lochte, en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

    Las marcas Speedo, Ralph Lauren, Airweave y Syneron-Candela anunciaron este lunes que han retirado su patrocinio al nadador olímpico estadounidense Ryan Lochte luego del incidente que protagonizó junto a otros tres atletas en una estación de servicio de Río de Janeiro donde dijeron haber sido robados, una versión que luego fue desmentida tras una investigación policial.

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    Speedo, la marca deportiva dedicada a la producción de trajes de baño y otros artículos relacionados con la natación, indicó en un comunicado escrito que pese a haber disfrutado de su relación con el nadador por más de una década "no puede condonar la conducta que va contra los valores que la marca ha defendido por mucho tiempo".

    Speedo agregó que donará una porción de los 50,000 dólares que le pagaba a Lochte a la organización caritativa 'Save the Children'.

    También se supo que la marca de diseñadores Ralph Lauren, que vistió a todos los atletas olímpicos este año, indicó que no renovará el contrato con el nadador, que había sido firmado con el atleta solo por el año 2016. Ralph Lauren retiró la imagen de Lochet de su página web, llena de atletas olímpicos a propósito del evento deportivo mundial.

    Por su parte, la marca japonesa Airweave, que proporcionó los colchones para todos los deportistas estadounidenses en Río, señaló que su acuerdo con Lochte era "en apoyo a los Juegos Olímpicos de Río 2016" y la compañía ha decidido terminar esta colaboración.

    Entre tanto, la empresa Syneron-Candela, que comercializa productos y tratamientos para la piel como la reducción de arrugas y de cabello con laser (Gentle Hair Removal), también emitió un comunicado donde explica que terminará sus relaciones de negocio con el deportista, quien era desde abril embajador de la marca.

    "Nosotros procuramos un alto nivel y buenos valores en nuestros empleados, y esperamos lo mismo de nuestros socios", indicó la compañía.

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    Investigación

    Tras una investigación policial se determinó que los cuatro nadadores olímpicos de EEUU -que afirmaron que fueron robados a punta de pistola- inventaron la historia para tapar los daños que hicieron a una puerta de la estación de gasolina donde se encontraban.

    Después de días de inconsistentes declaraciones entre los atletas, se conocieron las imágenes de las cámaras de seguridad de la Villa Olímpica, que muestran a los nadadores regresando tranquilamente a la residencia con sus pertenencias. También se conocieron las imágenes de la gasolinera, que no muestran la violencia a la que –dijo Lochte– habrían sido sometidos.


    Video Paso a paso: así fue la noche de los cuatro nadadores olímpicos estadounidenses en Río
    En la madrugada del domingo pasado cuatro nadadores olímpicos estadounidenses denunciaron haber sido asaltados, cuando en realidad intentaban ocultar un incidente donde vandalizaron una estación de gasolina, aparentemente luego de salir de una fiesta y en estado de ebriedad.
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    1:17 mins

    Según la versión policial, Jack Conger, Gunnar Bentz, Ryan Lochte y James Feigen fueron abordados por guardias de seguridad que les pidieron que pagaran lo dañado.

    Esa noche, los atletas fueron al baño de la gasolinera. Pero estando allí "uno o todos ellos" lo vandalizaron, según la policía. Rompieron los espejos, jaboneras, un cartel de publicidad y las papeleras. La prensa brasileña asegura que los nadadores estaban borrachos. El dueño de la estación (que no se identificó) incluso contó al diario O Globo que los deportistas orinaron por todas partes.

    Este incidente desvió durante varios días la atención de los Juegos Olímpicos de Río debido al alto perfil del atleta y a la expectativa que se había generado en torno a los temores de organizar unos juegos en una ciudad con altos índices de criminalidad.

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