Pablo Aguilar admite que el 'Turco' Mohamed es su papá en el futbol

Pablo Aguilar, defensor central de Cruz Azul, mostró un gran cariño y eterno agradecimiento para Antonio Mohamed, tras el partido que se avecina entre la Máquina y Rayados de Monterrey.

“Estoy agradecido al ‘Truco’ por todo, yo lo llamo así como mi papá en el futbol, él me dio toda la confianza. Él fue el que me recomendó para llegar al futbol mexicano, solo tengo palabras de agradecimiento y siempre va a ser un orgullo enfrentarlo”, reveló el zaguero guaraní.

Por otra parte, apenas cumplió su primer partido en Liga BBVA MX tras una lesión que lo marginó siete meses de las canchas y admite haber pensado totalmente en el retiro, pero ahora está enfocado adquirir confianza.

“No tengo miedo ni nada por el estilo de decirlo. Sí, sí lo he pensado (en el retiro) yo creo que más bien es el momento que me agarró por la edad, tal vez si uno era mucho más joven o algo así, era muy distinto. A lo largo de mi carrera lesión, lesión… nunca había tenido y esta fue como la primera y fuerte así, sí me pegó bastante y más porque uno no podía mover la pierna", contestó el paraguayo.

Tras su lesión y primeros minutos en la cancha con las fuerzas básicas, reveló sentirse extraño y con inseguridad, pero fue asesorado psicológicamente por sus compañeros para ir olvidando las sensaciones de extrañeza.

“Si me quedaba duda todavía hasta el primer partido con la Sub 20, me quedaba esa duda porque bueno, sentía que la pierna como que molestaba todavía, no me sentía al 100. Otros compañeros me decían que es así, es normal, uno se tiene que acostumbrar a eso, después de eso me sentí más relajado, como que en el partido se te va el dolor, es otro tema”, indicó Aguilar.

Finalmente, desconoce cómo se lleve a cabo el proceso de lesiones en otros clubes, pero por lo pronto, en el club cementero recibió todo lo necesario para sentirse protegido y apoyado para salir adelante.

“Desde que me lesioné, sinceramente, el club siempre estuvo apoyándome, siempre estuvo conmigo, cuando me operé me llenaron de canasta de frutas, de regalos”,