Emociones encontradas en el triunfo de Barcelona en la Copa del Rey

Un partido lleno de emociones se vivió en el Vicente Calderón por la final de la Copa del Rey entre Barcelona y Sevilla que al final los Blaugranas lograrón levantar un título más.

Un partido lleno de emociones se vivió en el Vicente Calderón por la final de la Copa del Rey entre Barcelona y Sevilla que al final los Blaugranas lograrón levantar un título más.

Los aficionados vivieron en todo momento el partido al filo de la butaca con las constantes llegadas de los equipo quienes dejaron todo en la cancha.

Los 120 minutos se disputaron con gran intensidad, misma que le costó a ambos equipos por varias expulsiones que se presentaron.

Primero la de Mascherano por parte del Barcelona, quien en su intento de evitar el gol en contra jaloneó en los linderos del área a Gameiro cuando apenas se jugaba 35 minutos.

Con los jalones del argentiano, Gameiro cayó al césped y Mascherano se llevó la roja ante los reclamos del Barcelona.

Con los jalones del argentiano, Gameiro cayó al césped y Mascherano se llevó la roja ante los reclamos del Barcelona.

Mascherano se fue cabizbajo a los vestidores al saber que iba a complicar el juego del Barcelona en los minutos restantes del partido ante Sevilla.

Sevilla, con un hombre más en el campo se fue con todo hacia el frente y puso a temblar a todo Barcelona.

Y las cosas se iban a poner más complicadas para el Barcelona en la segunda parte que encendieron las alarmas en Barcelona y en Uruguay.

En su intento de controlar el balón, Luis Suárez se lesionaba el muslo derecho y tenía que abandonar el juego.

El uruguayo tuvo que ser sustituído por Rafinha, Suárez sabía que las cosas no estaban bien y abandonó el campo desconsolado.

En su camino al banquillo, Luis Suárez mostraba lágrimas de impotencia por quedarse fuera de la final y muy posible de la Copa América Centenario

Messi no daba crédito de lo que sucedía. Barcelona sintió un bajón anímico y sabía que el Sevilla lo aprovecharía.

Sevilla tenía chances de poder consagrarse, buscó por todos lados pero no pudo batir el arco de Ter Stegen.

Ever Banega, el mejor jugador del Sevilla en el campo, estuvo cerca de anotar pero para la mala suerte de su equipo no lo consiguió.

Sevilla quien no aprovechó el tener un hombre más en el campo, se quedó con el mismo número de jugadores que Barcelona cuando Banega derribó a Neymar muy cerca del área.

El central no dudó en mostrarle la tarjeta roja al argentino.

Banega se fue solo al vestuario, pero sabía que ahora el Barecelona tenía la oporunidad de aprovechar el estado animico del Sevilla y que el juego sería parejo en los tiempos extras.

Tras las dos expulsiones el juego no dejó de ser intenso y por momentos agresivo por parte de ambos equipos.

Y apenas en el minuto seis del primer tiempo extra, Messi sacó una pincelada y dejó solo a Jordi Alba para que Barcelona marcara el primero del partido.

El defensor del Barcelona sorprendió a toda la defensa de Sevilla para batir el arco de Sergio Rico.

La alegría se desbordó por todo el Vicente Calderón por el gol de Jordi Alba, que acercaba a Barcelona al doblete en la temporada.

El banquillo blaugrana, comandado por Luis Enrique, se desató en júbilo. Sabían que estaba muy cerca la victoria.

Con un efusivo abrazo, Jordi Alba y Messi festejaban el gol.

Ya con más confianza, Barcelona fue mas intenso y buscó el segundo gol que llegaría en el final del partido luego de la expulsión de Carrico, que dejó al Sevilla con nueve jugadores.

Messi con otra gran asistencia dejó solo a Neymar quien mandó a guardar el balón con un suave toque.

Así Neymar marcaba el segundo del Barcelona y sellaba el triunfo de 2-0 sobre Sevilla para conseguir la Copa del Rey y el doblete.

Las esteladas se alzaron por todo el Vicente Calderón para celebrar el título del Barcelona.

El conjunto blaugrana festejó son su gente su vigésima octava Copa del Rey en su historia.