La lluvia se convierte en una protagonista amenazante en la definición de Roland Garros

La lluvia se invitó a la segunda semana de Roland Garros y lo hizo con fuerza para provocar la suspensión de la jornada del miércoles al completo, la cuarta vez en lo que va de siglo, y alterar el desarrollo normal del torneo.

La segunda tanda de cuartos, dos masculinos y dos femeninos, prevista este miércoles se disputará el jueves. De golpe, las semifinales femeninas se disputarán, al igual que las masculinas, el viernes. Si el tiempo lo permite.

La previsión no es buena. Tras una primera semana en la que brilló el sol, la lluvia ha llegado para quedarse, si aciertan los meteorólogos.

"Todo el mundo espera con impaciencia la semifinal entre Nadal y Federer el viernes. Pero las previsiones no son buenas. Estamos estudiando todas las posibilidades", aseguró el director del torneo, Guy Forget.

El gran perjudicado es el serbio Novak Djokovic, número 1 del mundo, que se verá obligado a jugar los tres partidos que le restan en cuatro días.

La intensa lluvia que cayó en París les impidió a Nadal y Federer acudir a los entrenamientos que tenían previstos en pistas descubiertas, por lo que tuvieron que conformarse con ejercicio gimnástico.

Tampoco le ha pintado bien al cuadro femenino. Dos duelos de cuartos se jugarán cuando estaban previstas las dos semifinales, que tendrán lugar, al igual que las masculinas, el viernes, un día antes de la final.

La lluvia es un inconveniente importante que sucede el último año que Roland Garros se disputará sin ninguna pista cubierta.

A partir del año próximo está previsto que el Grand Slam de París se una a sus hermanos de Australia, Wimbledon y Estados Unidos cuando se complete el techo retráctil de la central.

Roland

Hace tiempo que Roland Garros viene buscando esa pista cubierta. La lluvia ha perturbado numerosas jornadas del torneo y, según algunos especialistas, también la competición. Y es que apenas es la cuarta vez que se suspende una jornada completa en un siglo de torneo.