La reacción mezclada con frustración e impotencia, pusieron al director deportivo de Gallos Blancos de Querétaro, Joaquín Beltrán, como una presa del Código de Ética de la Liga MX, luego de que denunciara que su equipo había sido objeto de un “robo” por parte del árbitro Erick Yair Miranda, quien marcó cuatro penales en el juego ante Cruz Azul, y tres de ellos en contra de los emplumados.Con el rostro desencajado, pero con la sangre hirviendo, así apareció en la sala de conferencias del Estadio La Corregidora el dirigente queretano, quien tras escuchar las declaraciones del estratega Jaime Lozano, de inmediato se acomodó frente al micrófono para dejar salir toda esa presión que están viviendo y con todos sus dardos dirigidos al silbante.“No pienso demeritar el esfuerzo que han hecho los rivales en las últimas semanas, pero lo de hoy es lamentable, es inaudito, es un robo, y no es algo nuevo. Los invito a revisar lo que pasó en Puebla la semana pasada, lo que pasó con Monterrey cuando vino acá”. Sentenció el ex jugador.Su molestia y sus acusaciones fueron una bomba de tiempo, y también una postura que para muchos puede ser plausible, aunque no así para el Código de Ética de la Liga MX y para quienes se encargan de hacerlo valer y ejecutarlo, pues todo hace pensar que el dirigente queretano sería desplumado.Para llegar a la aplicación del reglamento de sanciones, en primera instancia debe existir una protesta o inconformidad de la Comisión de Árbitros que encabeza el ex internacional Arturo Brizio Carter, situación que hasta el momento de redactar esta colaboración no había existido públicamente algún pronunciamiento.En caso de que los dirigentes arbitrales decidan no manifestar su molestia por los conductos indicados, entonces podría entrar en acción la Comisión Disciplinaria, y para tomar el caso de oficio, se tendrían que apoyar en los programas de televisión o radio donde fueron emitidas las palabras de Joaquín Beltrán.También echarían mano de lo publicado en los diarios y consultar las redes sociales a nivel nacional, y el siguiente paso sería anunciar que se iniciaría una investigación de oficio y, en su momento, se daría a conocer la resolución de la misma, donde caben todas las posibilidades y entre ellas, sería una sanción y multa.Hasta aquí parece que todo está dentro de los protocolos que suele presumir la Liga MX, pero también sería importante saber cuál es la postura de la actual administración de la Comisión de Árbitros que posiblemente mande a la congeladora a Erick Yair Miranda, porque su actuación puso una vez más en tela de juicio a su gremio.