El técnico de Cruz Azul Paco Jémez siempre ha vivido entre las llamas de la polémica y su más reciente comportamiento al mostrar el dedo medio “a un sujeto” que lo insultó a él y a sus dos hijas y no a la afición de celeste, tras empatar 0-0 con Toluca, desde luego que es reprobable, pero tampoco es algo que nos deba sorprender.Poner al estratega celeste en la hoguera ha resultado un tema habitual en la Liga MX, pero también debemos reparar en que se trata de un personaje que si algo no esconde es su verdadera identidad, y es simplemente eso, un tipo frontal y que su identidad lo retrata como es él.Lo que sucedió el sábado en su camino rumbo al vestidor en la cancha del Estadio Azul, es un reflejo de que Paco Jémez es temperamental, pocas veces se queda callado, y máxime cuando está bajo presión, de ahí sus iracundas y cuestionables comportamientos, que difícilmente abandonará.El ejemplo más claro lo puso sobre la mesa en la sala de conferencias en las instalaciones de La Noria, cuando apareció flanqueado por el director deportivo del club, Eduardo “Yayo” de la Torre, porque cuando por unos segundos se llegó a pensar que estaba ahí, para ofrecer una disculpa por su seña obscena, el estratega salió para defenderse.Así es Paco Jémez quien ya había vivido una situación similar hacer cuatro años cuando dirigía a Rayo Vallecano y escuchó gritos en su contra, y casualmente en aquella ocasión, también argumento que respondió así, porque se habían metido con su familia, situación que lo hizo explotar.La identidad de una persona, es sin duda su sello. OSORIO SALIÓ FORTALECIDO.Hace una semana a la reunión del Comité de Desarrollo Deportivo de la Liga MX, llegaron varios de sus integrantes con la firme intención de debilitar la permanencia del estratega colombiano, Juan Carlos Osorio y poner en entre dicho su continuidad en el banco de la selección nacional.Pero bastaron cerca de 2 horas con 30 minutos, para calmar los ánimos de aquellos directivos, que con sus argumentos y formas de ver el futbol, creen que se estaría a tiempo para dar un golpe de timón en el Tricolor o al menos hacer entrar en razón al colombiano de que sus filosofías y metodologías, no son del todo convincentes.Esa “ala” opositora expuso ante el presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Decio de María Serrano y el Secretario General del organismo, Guillermo Cantú, sus puntos de vista y propuestas para el futuro inmediato del equipo mexicano, mismas que fueron escuchadas y anotadas, para hacerlas llegar al entrenador.También la FMF expuso ante los representantes de los clubes, sus conclusiones de lo sucedido en el verano, tanto en Copa Confederaciones y Copa Oro, y donde no sólo se defendió el proceso de Juan Carlos Osorio, sino que también se aceptaron los errores cometidos.Luego de esta larga reunión todos los asistentes se fueron de la Casa del Futbol en el Estado de México, con la firme intención de sumar en pro de un camino más halagador, no sólo para Juan Carlos Osorio, sino para el Tricolor en la recta final de la eliminatoria mundialista y comenzar a detallar el proyecto para Rusia 2018.