“No conozco a un técnico que ponga una alineación para perder”. Frase de mi respetado Enrique Meza, al cuestionarle el porqué de algunas alineaciones que parecen poco lógicas o entendibles.A propósito de las críticas que tiene hoy el técnico de Atlas José Guadalupe Cruz por no poner de inicio a Matías Alustiza en la vuelta de cuartos de final contra Chivas.Ya en frío, lo que cuestionaría sería el tímido planteamiento táctico con el que enfrentó una eliminatoria con una ventaja de 1-0 en la ida.Nada garantiza que con Alustiza hubiera sido diferente.Dudo que los rojinegros hubieran sido más agresivos a la hora de contragolpear, con la presencia de un jugador que según palabras de su técnico, no se encontraba al cien por ciento al momento de iniciar el duelo.Con Matías o sin él, el planteamiento hubiera sido el mismo.A favor de Cruz, atacando muy poco, casi nada, mantuvo la eliminatoria en el alambre hasta el último segundo.Pero lo más importante, el llamado “Profe” “encontró petróleo” en un equipo que no estaba armado para calificar y si para sufrir bastante.Desafortunadamente hay frases como “eres tan bueno como tu último resultado”, que sentencian el buen trabajo de 17 jornadas más una ida de cuartos. Malos mensajesMucho de manipulación existe tras los hechos violentos del pasado sábado en el estadio de los Rayados, luego de la conclusión del Clásico del Norte.Hace tiempo que el aficionado regio recibe cotidianamente por parte de los medios de comunicación locales, mensajes que poco o nada tienen que ver con la esencia del juego.“Diferentes”, “incomparables”, “más que un clásico”, “una rivalidad como ninguna otra” “Monterrey: Ladrón de mi cerebro” son algunos conceptos que, mal utilizados y condimentados con dosis de encono, polarización y hasta odio, han provocado con el paso del tiempo, que un partido de futbol, motivo de orgullo de la región primero deba tener a sus aficionados en secciones distintas de un mismo inmueble y a partir del sábado, obligatoriamente en estadios distintos.No hay espacio para la convivencia.