Enrique Burak: Tuerto en el país de los ciegos

Chad Ochocinco siempre ha generado en mi un cierto conflicto. ¿Era acaso un buen receptor y estaba en el lugar ideal para acumular cifras interesantes, o en realidad ha sido mejor aún para promover su imagen y provocar que se le volteara a ver en base a sus declaraciones y payasadas?

Llegó a los Bengalíes como la selección total numero 36 del draft del 2001, todavía como Chad Johnson, y en 10 temporadas con ellos fue sumamente regular, incluyendo el tiempo en el terreno de juego. En 7 campañas participó en los 16 juegos, y en las restantes jugó en 12, 13 y 14 partidos.

En 7 ocasiones superó las 1,000 yardas, encabezando dos veces a la Conferencia Americana, y en una a la NFL. Por otro lado nunca llegó a las 100 recepciones en un año, pero se acercó bastante, con 4 temporadas de 90 ó más, aunque también es cierto que su rendimiento ha ido decreciendo, cosa que no necesariamente es achacable a él, porque si no le tiran pases, por obviedad sus números irán para abajo.

Capturó 72 envíos en el 2009, 67 en el 2010, su último en Cincinnati, y con Patriotas el año pasado apenas 15 en 15 juegos de los que únicamente inició en 3.

Ahora con 34 años de edad, y un paso con más pena que gloria con New England, aunque llegó a un Super Bowl, regresa a casa para jugar con los Miami Dolphins que esperan, puedan sacarle las últimas gotas como jugador profesional.

Para abrirle un espacio Miami se desprendió de Terence Brown, y en marzo pasado se deshicieron de Brandon Marshall que fue enviado a los Chicago Bears a cambio de un par de selecciones colegiales, por lo que Ochocinco es ahora el receptor con más experiencia y mejores cifras en todo el conjunto.

Detrás de él encontramos a Lagedu Naanee que arriba este año luego de 4 campañas en San Diego y una en Carolina, y que en total tiene 4 recepciones para anotación; Davone Bess, con los Delfines desde el 2008 y con 11 visitas a las diagonales; y Brian Hartline, que va por su cuarta temporada con los Delfines y que ha logrado 5 touchdowns.

Por todo lo anterior Ochocinco tiene la oportunidad de brillar, pese a su veteranía, porque es "el tuerto en el país de los ciegos", y es aquí donde comprobará su real valía.

Para enviarle pases tendrá como compañeros a Matt Moore, titular el año anterior, a David Garrard que arribó tras el fracaso para hacerse de los servicios de Peyton Manning, y el novato Ryan Tannehill, octava selección total del reclutamiento.