Los receptores de los Patriots en la era de Tom Brady

Tom Brady ha sido el quarterback titular de los New England Patriots desde 2001, de manera casi ininterrumpida, pues se perdió casi toda la temporada 2008 por una lesión. Aunque esta posición ha tenido un solo dueño en este siglo, sus envíos han sido atrapados por más de 50 manos. Aquí te presentamos a los más importantes de esos receptores.

Troy Brown tenía ocho años con los Patriots cuando Brady tomó la titularidad, en 2001. Fue el único equipo con el que jugó hasta su retiro en 2007 y ganó tres Super Bowls.

David Patten llegó a los Patriots en 2001 y permaneció en el equipo hasta la campaña 2004, justo el lapso de mayor esplendor de la franquicia con tres títulos en cuatro años.

Rod Rutledge sólo jugó cinco años en la NFL, los primeros cuatro en New England. Su última temporada con los Patriots fue en 2001, la primera de la era Brady y la del primer título de Super Bowl de la franquicia.

Tras siete años con los Seahawks, el ala cerrada Christian Fauria llegó a New England en 2002. donde jugó otras cuatro temporadas y acumuló dos anillos de Super Bowl.

Un receptor de época. Deion Branch fue el MVP del Super Bowl XXXIX, donde vencieron 24-21 a Philadelphia, al acumular 143 yardas en 10 recepciones. Jugó con los Pats de 2002 a 2005 y en parte de la temporada 2010.

El ala cerrada Daniel Graham jugó en New England de 2002 a 2006, en donde participó en dos Super Bowls. Un receptor efectivo, aunque de bajo perfil.

Un paso fugaz el de David Givens en la NFL, con cinco temporadas entre 2002 y 2006, las primeras cuatro con los Patriots. Ahí se quedó con dos anillos de Super Bowl. Terminó su carrera con los Titans.

Ben Watson llegó en 2004 a New England, donde jugó por seis temporadas. Este ala cerrada participó en dos Super Bowls, con un triunfo y una derrota.

Reche Caldwell sólo jugó la temporada 2006 con los Patriots, en la que llegaron a la Final de la AFC. Recibió 61 pases para 760 yardas en toda la campaña. Antes jugó cuatro años con los Chargers y terminó su carrera al año siguiente con los Redskins.

Una apuesta extraña fue la de llevar a un receptor consagrado como Randy Moss. Llegó en 2007, aquella temporada del invicto en el calendario regular que terminó con la derrota en el Super Bowl XLII ante los Giants. Anotó 47 touchdowns con los Patriots en tres años, pero se quedó sin su anillo de campeón.

Donte' Stallworth jugó sólo dos temporadas con los Patriots, en 2007 y 2012. Además de perder el Super Bowl XLII, tuvo un desafortunado regreso cinco años después, pues empezó en el equipo de reservas, regresó al roster por una lesión de Julian Edelman y se lastimó la rodilla en su primera y única recepción, que fue de touchdown de 63 yardas.

Wes Welker marcó una época con los Patriots. Fue uno de los blancos favoritos de Brady entre 2007 y 2012, seleccionado a cinco Pro Bowls y sólo en una temporada en New England no superó las mil yardas. Sin embargo, le tocaron las dos derrotas en Super Bowl ante los Giants.

Kyle Brady tuvo un paso muy fugaz por los Patriots. Sólo en la temporada 2007, la de su retiro, con nueve recepciones para 70 yardas y dos anotaciones.

Brandon Tate fue elegido en la tercera ronda del Draft de 2009 por los Patriots, con los que jugó dos años. Apenas tuvo 24 recepciones, pues su rol principal era de regresador de patadas.

El ala cerrada Alge Cumpler sólo jugó su año de retiro, 2010, con los Patriots. Apenas recibió seis pases para 52 yardas. Antes jugó para los Falcons y los Titans.

Considerado uno de los más grandes alas cerradas de la historia, Rob Gronkowski ha sido uno de los receptores más confiables para Brady desde 2010. Tiene cuatro nominaciones al Pro Bowl y un anillo de Super Bowl. Su participación el próximo 5 de febrero está casi descartada por una lesión que lo tiene fuera del campo desde finales de noviembre.

El caso de Aaron Hernandez es uno de los más lamentables en la historia de la franquicia. Jugó como ala cerrada de 2010 a 2012, tras una espectacular carrera colegial, pero en junio de 2013, justo después de firmar una jugosa extensión de su contrato, fue detenido por su presunta participación en el asesinato del novio de la hermana de su esposa. Dos años después fue sentenciado a cadena perpetua.

Brandon Lloyd jugó para los Patriots solamente en 2012, donde acumuló 74 recepciones para 911 yardas. Se retiró al año siguiente con los 49ers, el equipo en el que militó en sus primeras tres campañas.

Aaron Dobson jugó de 2013 a 2015 con los Patriots, en los que acumuló solamente 698 yardas. Sus números sobrios contrastan con su elección en la segunda ronda del Draft.

Julian Edelman es el receptor estelar en la actualidad de los Patriots. Llegó en 2009, pero tras cuatro años de poca participación, en 2013 logró la confianza de Brady y el coach Bill Belichick y se ha vuelto una pieza inamovible. Su participación en el Super Bowl XLIX fue vital para la victoria sobre los Seahawks.

Kenbrell Thompkins fue reclutado por New England en 2013, pero apenas iniciada la siguiente temporada, se fue a Oakland. Tuvo números discretos con los Patriots, con apenas 38 recepciones para 519 yardas.

Michael Hoomanawanui jugó para New England de 2012 a 2015, en donde obtuvo un anillo de campeón. Tuvo números pobres en su paso por la NFL.

Brandon LaFell fue uno de los blancos favoritos de Brady en 2014, con 953 yardas totales, pero su rendimiento bajó al año siguiente, por lo que fue mandado con los Bengals, donde retomó ritmo.

Keshawn Martin solamente jugó en 2015 con los Patriots, donde tuvo 24 recepciones para 264 yardas, aunque su rol principal es de regresador de patadas.

Martellus Bennett llegó este año procedente de Chicago y tuvo que ponerse las pilas para suplir la labor del lesionado Rob Gronkowski, lo cual ha hecho de muy buena manera. Está en su noveno año en la NFL.

Chris Hogan salió del anonimato en la Final de la Conferencia Americana, con una actuación de nueve recepciones y 180 yardas. Los Falcons ya no sólo se tendrán que preocupar por Julius Edelman. Hogan jugó cuatro años antes para los Bills.