La Selección Mexicana entrenó por última vez de cara al inicio de la Copa Oro 2019 y lo hizo sin mayores contratiempos, con los 23 elementos definidos y pensando en Cuba, rival en turno del torneo.El entrenamiento se realizó este viernes por la mañana contrario a lo que se tenía previsto, pues el plan estaba inicialmente diseñado para que el equipo realizará el entrenamiento y reconocimiento en la cancha del Rose Bowl, sede del partido.Sin embargo, el cuerpo técnico comandado por Gerardo Martino, decidió que entrenarán en la misma cancha que lo habían hecho el resto de la semana con la intención de que el equipo no hiciera el recorrido hasta Pasadena.El tema es que la distancia entre el hotel del Tri y el Rose Bowl es de más de 30 kilómetros, situación que en tiempo se traduce en más de una hora de recorrido por el tráfico que caracteriza a la ciudad californiana.En consecuencia, el Tri entrenó, se puso a punto ya con la baja confirmada de Jorge Sánchez, quien simplemente miró el entrenamiento como un espectador más, mientras que Héctor Moreno mantiene el trabajo diferenciado aunque con más posibilidades de estar listo.Saltó a la vista el hecho de que los jugadores hayan entrenado sin publicidad en sus uniformes, aunque es un tema de que fue un entrenamiento oficial y en consecuencia bajo las reglas de Concacaf.