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    Lucha Libre

    Negro Casas: “En dos años puede llegar el retiro”

    El deseo del luchador mexicano de seguir en el ring hace que sus rivales lo vean como un sinodal complicado.

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    Por:
    Emmanuel R. Marroquín.


    Video Negro Casas aún muestra calidad en el ring y aplaza el retiro
    El luchador mexicano dice que necesita la vida que el ring otorga y para ello se exige en cada entrenamiento.
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    Negro Casas, con 42 años como luchador profesional, aún manifiesta su calidad y reciedumbre en las distintas arenas del país o el extranjero. Estandarte del Consejo Mundial de Lucha Libre, con 61 años de edad; su longevidad, capacidad y desempeño sobre los cuadriláteros, son dignas de encomio.

    “Yo pienso que el que sueña, el que tiene pasión, busca la manera de mantenerse, buscas la manera de estar ahí y buscamos la manera de seguir gustándole al público”, dijo en entrevista con Fernando de Jesús Torres, de TUDN.

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    En cuatro décadas de actividad, José Casas Ruíz, nombre real del luchador, ha enfrentado a los más destacado en el ámbito nacional e internacional de la lucha libre. Aunque las lesiones se han presentado, hoy goza de cabal salud y principalmente del deseo de seguir en el deporte que lleva en la sangre.

    “El día que yo de veras me sienta como para no poder dar una buena lucha, ese día lo voy a decidir. A mucha gente se le hace muy fácil: ‘no pues ya estás viejo, ya retírate’; una serie de cuestiones que te escriben. Ahora que es muy fácil escribir y opinar, pero mucha gente, por ejemplo, para empezar, no se imaginan que esto es tu vida, que esto te da vida”.

    Y es que la capacidad del “4:40” le permite enfrentar tanto a luchadores experimentados, como a las nuevas generaciones, que ven en él un sinodal sumamente complicado.

    El Negro Casas, no desentona y para ello se exige al máximo en cada entrenamiento. Del retiro no quiere hablar, no piensa en él; se maneja por lapsos, escucha a su cuerpo. Sabe que si su deseo, capacidad y resistencia se mantienen como hasta hoy, seguirá en la brega; de lo contrario, vendrá el adiós.

    “Yo me estoy azotando solo porque necesito esa vida que te da el ring, necesito eso, yo pienso que mientras Dios me permita seguir desarrollándome con los jóvenes voy a durar un par de años aquí y seguir haciendo lo que me gusta”, indicó a TUDN.


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