MONTERREY, Nuevo León.- La vida de Rogelio Funes Mori cambió en la Sultana del Norte. El jugador, que era blanco de burlas y críticas por sus fallas en Argentina cuando militaba en River Plate, ha demostrado desde su llegada a Rayados que es un goleador nato, un artillero implacable y que con la Pandilla vive el mejor torneo goleador de su carrera en la Primera División.
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Su anotación ante Jaguares fue la novena en el Apertura 2015, cifra que jamás había alcanzado como profesional en un certamen, superando las ocho marcadas con el Eskisehirspor de Turquía.
A pesar de vivir su mejor etapa en su campaña de debut en el fútbol mexicano, el "Mellizo" no se conforma y busca más, pues a su llegada a la ciudad declaró a Mediotiempo que su meta de goles en el primer torneo con el Monterrey era de 15; a falta de cuatro partidos para que concluya el torneo regular, la cifra no suena disparatada.
Con River Plate, en su mejor torneo, Rogelio marcó siete goles; después emigró a Europa con el Benfica de Portugal, en el primer equipo no contó con buena fortuna y fue enviado a la Segunda División, donde hizo 13 tantos con el equipo B.
De tierras lusitanas se fue al Eskisehirspor de la Superliga de Turquía, en donde marcó en ocho ocasiones, que era su mejor registro en Primera.
En Rayados, Funes Mori contribuyó también con tres tantos en la Copa MX, torneo del que los albiazules ya fueron eliminados.
Hoy, Rogelio sigue con el deseo de mantener la pólvora lista para explotar frente a la portería rival y que lo ha llevado a registrar una mejor presentación en su torneo debut con Monterrey que la realizada por Guillermo Franco y Humberto Suazo, los últimos referentes en el ataque de los del Cerro de la Silla.
