UEFA Europa League
En fotos: El Genk belga le endilga cuatro al Besiktas en su terruño en la Europa League
El equipo de Bélgica fue a Turquía a vencer y a hacer ver mal a uno de los gigantes del balompié otomano; el tanzano Mbwana Samatta, figura del Genk.
Por:
TUDN
En juego de la fase de grupos de la UEFA Europa League, se midieron en el estadio Vodafone Park, en Estambul, el equipo local Besiktas y el KRC Genk de Bélgica. Hubo muchos goles.
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El equipo belga mostró mejor planteamiento desde el comienzo y pese a la atmósfera siempre hostil que representa jugar como visitante en Turquía, se sacudió los nervios.
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Y con buen fútbol, el Genk se fue adelante 1-0 en el marcador a los 23 minutos con tanto anotado por el nativo de Tanzania Mbwana Samatta, para aplacar un poco el complicado entorno.
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Después de eso se habría esperado una reacción del Besiktas, sin embargo fue el equipo belga el que generaba las mejores ocasiones de peligro y el que mejor circulaba el esférico.
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El partido se fue con ese marcador parcial de 1-0 al descanso pero se veía más cerca un segundo tanto de los belgas que de los turcos, pero el descanso habría de servir a ambos.
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Sin embargo, fueron los belgas los que salieron vitaminados para el segundo medio. De nueva cuenta se hizo presente el tanzano Samatta para marcar el 2-0 en favor del Genk a los 70 minutos.
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El desempeño y la actuación de los belgas en territorio turco estaba resultando no solo arrollador sino sorpresivo, pues el Besiktas es un equipo muy competitivo, teóricamente.
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Y tan solo transcurrieron cuatro minutos para que llegara la reacción del Besiktas. A los 74 minutos el brasileño Vágner Love puso el 2-1 y con ello la esperanza se encendía para los turcos.
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Pero a los 81 minutos, el congoleño Dieumerci Ndongala, aprovechó que el Besiktas se volcó con todo al ataque para marcarle el 3-1 a Loris Karius y dejar contra las cuerdas a los otomanos.
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Y para hacer las cosas todavía peores para el Besiktas. A los 83 minutos, apenas dos después de haber recibido el tercer gol, el polaco Jakub Piotrowski, puso el 4-1.
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Vodafone Park parecía un bosque desolado, silente, inanimado. Este cuarto gol del Genk dejó helados a los usualmente temperamentales y apasionados aficionados turcos.
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