¡Merci, Varane! Con dos regalos del francés, el City completó la obra

Una auténtica pesadilla vivió Raphael Varane en el Etihad y con él, todo el Real Madrid. El defensa francés regaló los dos goles con los que el Manchester City derrotó 2-1 al cuadro merengue y de paso lo eliminó de la UEFA Champions League.

Si el error del primer tiempo ya había sido garrafal, el del segundo fue mortal cuando intentó retrasar la pelota para Courtois y solo terminó asistiendo a Gabriel Jesus, quien definió sobre la salida del portero merengue y así herir de muerte a Zidane y compañía.

No se habían transcurrido ni 10 minutos cuando las malas noticias ya habían llegado al Real Madrid.

El partido estaba parejo, sin claro dominador hasta que el cuadro de Zidane intentó salir jugando, Varane no supo que hacer y le regaló la pelota a Gabriel Jesús, quien cedió al centro para la llegada de Sterling, quien simplemente definió para abrir el marcador.

La losa parecía muy pesada para los merengues aunque en el panorama seguían estando 2 goles, lo único que cambió es que esos solo servirían para alargar la serie y bajarle las revoluciones al City.

El partido se diluía entre un Real Madrid que no se sentía cómodo y un City que parecía esperar el momento para dar el zarpazo que prácticamente finiquitara la eliminatoria, pero llegó el por qué de Zidane.

Cuando todo mundo cuestionaba la titularidad de Rodrygo, el brasileño hizo una gran jugada individual se quitó un hombre de encima y metió un gran centro para Benzema, quien se levantó entre 3 defensas rivales y conectó de cabeza para vencer a Emerson. ¡Hay serie!

El tenor del partido no cambio mucho. El equipo de Guardiola tenía la pelota pero con poca profundidad, aunque sí con latigazos que le ponían nervio a la cabaña de Courtois, más cuando los merengues intentaban salir jugando.

Una buena jugada individual de Sterling y un disparo de De Bruyne provocaron más de un sobresalto a todo Madrid.

Manchester City salió como tornado en el segundo tiempo y en los primeros minutos cerca estuvo del segundo. Primero con un tiro de esquina que De Bruyne quiso convertirlo en gol olímpico y luego con una enésima falla en la salida del Madrid que Sterling perdonó.

La pelota era toda del City, pero al Madrid no le incomodaba, hasta parecía verlo mejor por las malas salidas que había tenido y eso lo alimentó Benzema cuando se quedó muy cerca del segundo en un latigazo hasta que llegó la sentencia de los Citizens.