Los secretos de Cardiff, el templo de la final de la Champions League en 2017

Cardiff, la capital de Gales, está ubicada a 240 kilómetro de Londres y es una ciudad portuaria ubicada al sur del país, solo separa da de Gran Bretaña por el Estuario del Severn. Ella recibirá la gran final de la Champions League en su edición de 2017.

Si bien la población de Cardiff es de aproximadamente 358.400 habitantes, los dispositivos de seguridad se han activado para los visitantes a la gran final.

Las autoridades están muy sincronizadas para evitar sorpresas de ataques terroristas, algo muy común en este tipo de eventos deportivos. Cardiff es una ciudad compacta de fácil acceso.

Cardiff tiene una dimensión de aproximadamente el 4 por ciento de la zona urbada de Londres, pero su tradición futbolera la lleva a tener dos estadios.

El estadio Nacional de Gales es la casa del equipo de rugby desde 1999, cuando fue inaugurado, pero se usa como escenario de fútbol. El finlandés Jari Litmanen anotó el primer gol internacional en este escenario en un triunfo de su país como visitante 2-1 contra Gales en marzo del 2000.

La capacidad del estadio es de 74.500 personas. Una estadística curiosa indica que el equipo que ocupó el vestuario local en las primeras once finales de algún gran torneo disputadas allí fue el ganador.

El escenario tiene siete puertas de acceso tras ser construido con 56 mil toneladas de hormigón y acero, tiene 17 puntos de primeros auxilios y para recorrerlo tiene 12 escaleras mecánicas y siete ascensores. Para entreteimiento y descanso, tiene 124 suites de hospitalidad, siete salones de bienvenida, bares y siete restaurantes.

El estadio Millenium tiene techo retractil que para abrir o cerrar requiere 20 minutos, pero para esta final de Champions League se decidió que se estará cerrado.

Durante la remodelación del estadio de Wembley, el Millenium fue sede de la final de la FA Cup, torneo tradicional del fútbol inglés, entre 2001 y 2006.

El estadio cuenta con cesped de hierba natural que es modular y se pone sobre 7412 paletas que son removibles por si se quiere usar para otro tipo de eventos. Tiene sistema de riego y drenaje.

Cardiff está lleno de objetos conmemorativos para la gran final de la Champions League de 2017. A pesar de tener a Bale, la ciudad es imparcial con su comercio.

La mezcla de fútbol y tradición histórica ha sido uno de los elementos más explotados de Cardiff como sede de la gran final de la Champions League en 2017.

La tradición histórica de Cardiff es uno de sus elementos más atractivos y la visita a castillos y demás ha sido uno de los elementos turísticos más frecuentes para los hinchas.

Al ser una ciudad costera, el ambiente de Cardiff suele ser muy festivo y eso es algo que ha servido para que la población viva con intensidad la final de la Champions.

El noruego Ole Solkjaer, recordado delantero del Manchester United y de la selección de su país, es el actual entrenador del Cardiff City, equipo de la ciudad.

Real Madrid ya fue campeón de un certamen de Europa en Cardiff, en el 2014, cuando se impuso contra Sevilla en la Supercopa de Europa.

Gareth Bale ya celebró como campeón de un torneo europeo en su ciudad y en su país, luego de la mencionada Supercopa de Europa en 2014.

Bale es todo un ídolo en Gales, al punto que en Cardiff hay un busto en su nombre. Este se parece un poco más que el que hay en Portugal de Cristiano Ronaldo.

Bale y Gales lograron su cupo histórico a la Eurocopa del 2016 en el estadio Millenium.

La capital de Gales ya recibió el jueves 1 de junio de 2017 la final de la Champions League femenina, en la que se impuso Lyon.

Exjugadores como el inglés Steve McMannaman, Roberto Carlos, Cafú y demás llegaron a la ciudad como turistas y espectadores de la gran final.

Los fanáticos de Real Madrid y Juventus viven desde ya la alegría de la final del máximo torneo de futbol de clubes en el mundo en Cardiff, el templo de esta final de Champions.