Raúl Jiménez: El domador de lobos

Nacido en Tepeji, dentro de los dominios de Xilotepec. Emigró a la capital de la Nueva España para graduarse en altos vuelos en el club más grande del virreinato con el que conquistó varias gestas que atribuyeron glorias para la corona.

Los triunfos conseguidos en honor de su casta le permitieron ganarse un nombre y el favor de decidir su futuro. Se embarcó rumbo a la madre patria, donde aprendió de tácticas y consagró sus pies a una devoción colchonera.

Al desgaste de esta relación, Jiménez estuvo a punto de emular el viaje de Cristóbal Colón desde el Puerto de Palos, aunque permaneció en tierra para enfundarse, una vez más, en su traje de Caballero Águila, ahora en el viejo continente.

De nueva cuenta en los cielos, se apartó de las tierras conocidas de lenguas romances y volteó hacia el horizonte de celtas y anglicanos. Cruzó el canal para llegar a una isla donde fue criado por lobos y, eventualmente, se convirtió en el líder de la manada y listo para organizar campañas de lucha por la consumación del talento patrio.