La pasión de Mourinho: el portugués vivió con preocupación la derrota ante West Ham

Las cámaras se quedaron con Mourinho durante esta jornada para registrar sus mejores reacciones en el juego contra los Hammers disputado en Londres.

Al parecer, desde antes del comienzo del juego el portugués ya presumía lo que pasaría en el terreno de juego.

Una vez rodó la pelota en el Olímpico de Londres, 'Mou' se dedicó a dar instrucciones a sus jugadores.

Pero con el gol de Felipe Anderson su rostro ya era otro. El lamento era visible en el entrenador de los Diablos Rojos.

Se sacudió y ya pensaba en cómo conseguir el empate. La euforia también se apoderaba de él en algunos pasajes del partido.

Así como la incomprensión por algunos errores que cometían los suyos, sobre todo en salida y en el último tramo del ataque.

El segundo gol del West Ham lo sumió en un momento de extrema preocupación.

A pesar del altercado esta semana con Paul Pogba, cuando lo sustituyó no pasó a mayores. A penas un toque cordial, aunque no se miraron.

Ya con el tercer gol de los londinenses la situación era irreversible y así lo entendía el portugués.

Al final, un saludo con Manuel Pellegrini y directo al túnel para esconderse de las cámaras. Para muchos, podría ser el último partido de 'Mou' como entrenador del Manchester United o el penúltimo, si en se queda y en Champions League vuelve a tropezar.