Pep Guardiola con Claudio Bravo y otras broncas de entrenadores vs. jugadores

La imagen al final del partido fue esta, la de un Pep Guardiola exultante y un Claudio Bravo reacio.

Las versiones de una ruptura en su relación comenzaron a correr por todos los medios deportivos del mundo, tema que da paso para que se revisen los otros casos similares del catalán.

Pep y Alexander Hleb llegaron al tiempo al club blaugrana, pero su relación no fue la esperado.

"No creo que Guardiola fuera mejor entrenador del Mundo. Entrenó el mejor equipo, con los mejores jugadores", aseguró el bieloruso.

No fue tanto como un problema entre Guardiola y Cesc Fabregas, sino más bien una falta de entendimiento.

"Con Guardiola no terminaba de entender bien el sistema. Yo venía de otro fútbol y coger todo lo que él quería tan rápido era complicado, porque los demás ya lo tenían asumido", aseguró en su momento el mediocampista.

Cuando Bojan Krkic surgió de La Masía, muchos pensaron que era el sucesor de Lionel Messi por su gran calidad.

"Guardiola no me daba las suficientes oportunidades para demostrar lo que tengo dentro y eso duele. En muchos momentos no ha sido justo conmigo y ese es uno de los motivos por los que he decidido irme", fueron sus palabras al salir del club.

Desde la época en el Barcelona, Yaya Touré y Guardiola no acabaron con buena relación. El marfileño aseguó, al salir, que el entrenador no le hablaba y si hubiese hecho un intento por convencerlo de quedarse lo habría pensado dos veces.

Cuando el español llegó a dirigir al City, comenzó al su relación ya que hubo un incidente con el representante por el cual no lo puso a jugar por casi seis meses hasta que él pidió perdón publicamente.

Aunque mientras Guardiola estuvo en el F.C. Bayern Múnich la relación no era mala, una vez el español salió hacia Inglaterra la olla estalló.

"Guardiola vivía un poco en su propio mundo. Se pasaba el día pensando, '¿cómo puedo mover a mis jugadores dos o tres metros durante el partido para encontrar una solución perfecta?", comentó el alemán, quien agregó que con Ancelotti se sentía más cómodo.

Con otro que las cosas parecían bien fue con Frank Ribery, pese a que mientras estuvieron juntos nada estaba mal.

El francés, cuando Pep se fue del equipo y se confirmó la llegada de Carlo Ancelotti, aseguró que "por un entrenador como Ancelotti yo sí me como el césped. Sabe cómo tratar a los jugadores. Necesito a gente como él, Heynckes o Hitzfeld".

Uno de los casos más fuertes ha sido el de Zlatan Ibrahimovic, con quien comenzó todo de gran manera y terminó yéndose al pozo.

En su biografía, el sueco aseguró que después de un partido ante Villarreal, trató muy mal a Guardiola por dejarlo en la banca sin razón aparante. "Yo no tenía problemas con nadie. No hay nadie que pueda decir que hice algo mal. Los primeros meses todo era excepcional, iba muy bien y algo sucedió. Todavía no sé lo que pasó. Todavía estoy esperando la respuesta".