El Barcelona se consolidó este domingo como líder sólido de la Liga Española al empatar 1-1 en casa del  Valencia en un partido con polémica por un gol no concedido a LionelMessi en el primer tiempo por un balón que traspasó la línea.Fue una mitad para cada equipo y Jordi Alba logró enjugar a ocho minutos del final el tanto de Rodrigo Moreno para el equipo local,  con lo que mantuvo al Barcelona como líder del torneo con cuatro  puntos sobre el Valencia y ocho sobre Atlético y Real Madrid.La primera parte fue un monólogo del Barcelona, que dio un recital.  Si no se fue al descanso con ventaja fue por dos razones: le faltó  algo más de intención en los metros finales y, sobre todo, le  perjudicó una decisión arbitral clamorosa.El Valencia decepcionó profundamente durante la primera mitad. No  justificó por qué es el segundo clasificado de la Liga española. Se  dedicó a replegar sin presionar, jugando con excesivo respeto hacia  un rival que lo mareó. Fue un desastre y ni siquiera se le ocurrióprobar a Thomas Vermaelen, quien jugó sus primeros minutos del torneo  con el Barcelona.La jugada de la semana ocurrió a la media hora. Messi disparó desde la frontal, el balón se le escapó inexplicablemente a Neto y cruzó la  línea de gol. Pero los árbitros no lo dieron y el tanto se fue el  limbo. Con el llamado videorbitraje (VAR), el Barcelona se hubiera  ido al descanso con ventaja. Y merecida.Pero todo cambió en la segunda parte. Y de qué manera. El Valencia  puso toda la agresividad que le faltó en la primera mitad y se comió  al Barcelona, que de pronto se volvió irreconocible.El conjunto local comenzó a acumular llegadas cada vez más peligrosas hasta que cayó el gol. Fue a los 60 minutos, cuando Gayá dobló a  Guedes por el lateral izquierdo, mal defendido por Semedo, centró  atrás y apareció Rodrigo Moreno en el primer palo para marcar.El partido cambió su escenario por completo y el Valencia comenzó a vivir muy cómodo. El Barcelona se agarró a Messi y sus pases como  único argumento ofensivo. Y el argentino sacó el empate de la nada en  colaboración con Jordi Alba. A los 82 minutos, Messi puso una  asistencia imposible y el lateral marcó un gran tanto sin dejar caer el balón.Las oportunidades se sucedieron hasta el final, pero el empate quedó  como reflejo de un encuentro igualado que traerá polémica por el tanto no concedido a Messi en la primera parte.