El Real Madrid visita este martes al Viktoria Plzen checo con la necesidad de ganar y así dar un paso importante hacia los Octavos de Final de la UEFA Champions League.Son días inciertos para el actual campeón de Europa, sumido todavía en una crisis que nadie se atreve a vaticinar cuánto durará. Por lo pronto, su técnico interino, Santiago Solari, continúa ganando tiempo en una semana en la que se debe decidir si aguanta en el banquillo o si su club aborda la contratación de otro entrenador. El Real Madrid y Solari necesitan el triunfo. Consulta el calendario de juegos y los resultados de la UEFA Champions LeagueEl conjunto merengue todavía arrastra el lastre de su derrota 1-0 ante el CSKA de Moscú, que puso el Grupo G muy igualado. Real Madrid y Roma mandan con seis puntos, mientras el CSKA cuenta cuatro y ya con escasas opciones queda el Viktoria Plzen con una sola unidad.El actual campeón de Europa debe mirar no sólo la manera de resolver su clasificación para octavos, un objetivo muy accesible, sino de pelear por ser líder con vistas a una última jornada en la que se medirá con la Roma en la capital italiana.Pero primero debe superar al Viktoria Plzen, que en Madrid sembró el pánico al pelear hasta el final por el empate. Perdió 2-1 en un choque que a la postre sería el último de Julen Lopetegui como entrenador blanco en Champions.El conjunto de Solari venció el sábado 2-0 al Valladolid, pero ni por mucho resolvió las dudas que existen hacia su actual momento de forma, tan decadente. La endeblez del Viktoria Plzen le ofrece la posibilidad de recuperar parte de la confianza perdida, aunque para ello deberá actuar con mucha más firmeza que hace dos semanas.Este partido es una oportunidad para Gareth Bale, cada vez más censurado por su propia hinchada, que quiere menos minutos para el galés y más para el joven brasileño Vinicius. De momento, parece que Solari sigue apostando por el británico.La prensa de Pilsen calificó el choque como "el partido del siglo", pues la visita del campeón de Europa es una fiesta para un equipo tan modesto. Las 11.000 localidades del Doosan Arena llevan semanas vendidas y el partido promete contar con un sensacional ambiente.Será la primera visita del Real Madrid a la República Checa en 17 años. Entonces jugó ante el Spartak de Praga y venció por 3-2 en su camino a la conquista final de su novena Copa de Europa.