Consulta la ficha técnica del partido AQUÍ Consulta la tabla de la Liga de España AQUÍ Consulta el calendario de la Liga de España AQUÍEl Valencia, serio en defensa y muy efectivo en ataque, ganó 0-2 en casa del Sevilla, donde no lo hacía desde 2004 -el año de su último título liguero-, y da un paso de gigante para ser cuarto y clasificarse para la Champions, un objetivo al que prácticamente dicen adiós los sevillistas.El Valencia, que ahora saca 11 puntos más el gol average al Sevilla, quinto, con sólo 30 puntos en juego, supo aguantar el vendaval de ocasiones de los andaluces en la primera mitad y adelantarse a los 24 minutos con un gol de Rodrigo Moreno, que luego sentenció en el ecuador de la segunda parte con el 0-2 definitivo.Con el mexicano Miguel Layún de lateral por el lesionado Jesús Navas, baja además para el martes en Champions con el Manchester United, y la novedad de Nolito por el argentino Correa, el equipo de Vincenzo Montella empezó con brío y ganas, y controló el juego ante un rival pujante, con el brasileño Gabriel Paulista y Gayá -recuperado de sus molestias a última hora- en los laterales y que salió a lo suyo.Pero Rodrigo Moreno, tras avisar con un remate poco antes, aprovechó un grave error de Sergio Escudero, al dejarle el balón franco en el área, para fusilar a Sergio Rico y hacer el 0-1 a los 24 minutos.En el Valencia, muy exigido atrás y dedicado a aguantar su renta y a esperar un contragolpe, sólo Rodrigo, su punta más incisivo y acertado, inquietó a Rico. Antes del primer cuarto de hora de este periodo, soltó dos latigazos que solventó el meta local y luego, también a la contra, lo intentó Guedes, pero se topó con Layún.En plena ofensiva de los locales, pero sin ideas ni acierto en el remate, el hispanobrasileño no perdonó después tras otra contra, bien conducida por el exsevillista Geoffrey Kondogbia, al definir a la perfección en un mano a mano ante Rico y ampliar la ventaja de su equipo con el 0-2 en el meridiano de la segunda parte.Montella buscó más pólvora con Correa por Nolito, Ben Yedder por Sarabia y Sandro por Muriel, pero el Sevilla, impotente, bajó los brazos y jamás dio la sensación de tener opciones de remontada ante un rival letal y que prácticamente se asegura un puesto Champions.