Los dos grandes regalos del Gremio de Porto Alegre a la selección mexicana

El mundial de 1950 fue desastroso y lamentable para México; el Tri perdió por goleada ante Brasil de 4 a 0, después Yugoslavia le ganó por marcador de 4 a 1 y finalmente Suiza le pasó por dos a uno a los mexicanos por un decente 2-1 qué pudo haber sido peor si los nuestros no se hubieran presentado en la cancha. En medio de la crisi surgió también una valiosa relación de amistad entre el Gremio de Porto Alegre y el Tri.

Pese a los malos resultados de 1950 existe una anécdota que se recordará entre ambos y es que el Gremio prestó su piel para que el equipo saliera a la cancha en el tercer encuentro del mundial; en ese entonces la Selección Mexicana jugaba en color guinda, un color muy similar al que utilizaba Suiza, que portaba color rojo.

Fue entonces que por medio de un volado, el destino decidió que México utilizará la playera del Gremio, la cual no le trajo mucha suerte en el encuentro pero que lograron portar dignamente elementos como Antonio ‘La Tota’ Carbajal, José Luis Borbolla y Horacio Casarín.

Ese no es el único regalo que el Gremio de Porto Alegre daría México, años más tarde su hijo pródigo y el mejor futbolista que han tenido en toda su historia… Ronaldinho. El espectacular jugador representaría Brasil en la Copa Confederaciones de 1999 en México, esa que los aztecas ganaron en casa y en la cual brillaron Jorge Campos, Cuauhtémoc Blanco, Zepeda y Abundis, entre otros.

Eso no fue todo, años más tarde, tras conquistarlo todo, porque Ronaldinho ganó Champions, Mundial, Copa Libertadores, etc. deleitaría a los fanáticos mexicanos en la Liga MX con los Gallos del Querétaro.

Ronaldinho es el único extranjero que ha logrado llenar de aplausos al Estadio Azteca siendo rival, lo hizo en 1999 cuando perdió la Copa Confederaciones con Brasil ante México y también lo hizo enfrentando a las Águilas del América cuando vestía la playera queretana.

México y Brasil han mantenido estrechas relaciones en el fútbol a pesar de una gran rivalidad que ha ido creciendo con el tiempo en la cual los tricolores han logrado opacar en diversas ocasiones al famosísimo Scratch du Oro y pentacampeón mundial, agrado de arrebatarles la Medalla Olímpica de Londres en el 2012.

Pero es claro que entre Brasil y México la rivalidad va acompañada de afecto, uno que probablemente nació con los gestos del Gremio de Porto Alegre para el Tri.