El Estadio Azteca dictará la sentencia definitiva para México

El Estadio Azteca será el gran aliado o el gran enemigo de la selección mexicana en el Hexagonal Final de la Concacaf. El Coloso de Santa Úrsula, o impulsa al Tri, o lo acaba de hundir.

Normalmente, el Azteca es considerado como el estadio más temido de toda la Concacaf. Los factores son diversos: sus 105 mil butacas, el eco que se genera cuando la hinchada azteca apoya, la altura de la Ciudad de México, el clima y por supuesto, la polución de una de las capitales más contaminadas del planeta.

La historia y los números hablan solos: México solo acumula dos derrotas en partidos oficiales en el Azteca, un inmueble que hasta 2001, tenía el mito de ser el estadio donde el Tri se hacía inmortal.

Con cuatro puntos obtenidos en el arranque del Hexagonal, todos con el Tri como visitante, la lógica y los números hacen suponer que si México gana todos sus puntos como local, estará “caminando” rumbo a Rusia en el supuesto que perdiera en sus visitas en San Pedro Sula, San José y Puerto Príncipe.

Con 19 puntos, ninguna selección en Concacaf se queda sin Mundial. Dicha cifra le podría incluso dar al Tri el liderato del Hexagonal.

Sin embargo, hay un detalle particular: hace varios años que el Estadio Azteca ya no le pesa tanto a la selección mexicana. Es el 'Monstruo de Cien Mil Cabezas' que se le voltea al Tri cuando no se gana, no se golea y no se convence a la afición.

En el Hexagonal anterior, México rescató tres empates en casa frente a Jamaica, Estados Unidos y Costa Rica. Dichos encuentros acabaron 0-0, por lo que el Tri no era capaz ni siquiera de marcar un gol en el Azteca.

Con una racha 270 minutos sin anotar y sin ganar en el Coloso, recibió a Honduras que le ganó 2-1, conquistando así el cuadro catracho su primer triunfo en el Azteca y como decíamos, la segunda derrota del Tri en eliminatoria oficial.

Fue en el último encuentro del Hexagonal, ante Panamá, que México ganó su único partido en casa. Y lo hizo sufriendo, con un pésimo partido y con aquel milagroso gol de chilena por parte de Raúl Jiménez.

El saldo para México fue de seis puntos de 15 posibles en el Azteca. Al final, el Tri hizo 11 puntos en todo el Hexagonal para quedar en cuarto sitio de la eliminatoria y rasguñar la reclasificación ante Nueva Zelanda. El equipo azteca hizo cinco unidades fuera de casa, una cifra aceptable. A México le falló el Azteca, o más bien, México le falló al Azteca.

La eliminatoria mundialista rumbo a Rusia pasa por recuperar el Azteca y hacerlo impasable. De ser así, el Tri se volverá a ganar a su afición y caminará calmadamente rumbo a Rusia.