En la semana de las remontadas, la heroicidad no llegó al Cruz Azul
La Máquina se quedó a un solo gol de poder eliminar al América en Cuartos de Final.
Por:
Andrés Corona Zurita.
Video Espectacular atajada de Marchesín evitó la remontada histórica de Cruz Azul
El portero argentino del América salvó sobre la misma línea de gol el tanto que hubiera significado el 0-2 y la clasificación de la Máquina.
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La Champions League nos enseñó esta semana que no hay imposibles y que los marcadores adversos se pueden remontar; primero fue el Liverpool y después fue el Tottenham. Con base en ello, a miles de kilómetros de distancia, los aficionados al Cruz Azul, con ambos clubes ingleses como bandera, se ilusionaron con darle la vuelta al marcador en su serie ante América.
Pero no. Cruz Azul lleva más de 21 años sin momentos heroicos. Las remontadas, como los títulos, no le sonríen a una Máquina que vio una enésima eliminación frente a su archirrival que, literalmente, los tiene de hijos en México.
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Hubo ilusión, y por muchos lapsos de juego, se tuvo fútbol. Cruz Azul ganó el partido y se quitó de encima una larga racha de partidos perdidos contra América; pero al final, de nada sirvió pues fue incapaz de ganar por dos anotaciones de diferencia, las que requería por un frustrante partido de ida donde dejó ir la eliminatoria.
La Máquina estuvo a solo un gol. Oportunidades tuvo y de sobra; le jugó cara a cara al campeón de México y de paso, lo hizo con carácter, y con muchos ‘huev/&%’, tal y como se lo exigió su afición a media semana. Por lo menos, cRUZ azul hoy se murió de algo.
Pero al final, en La Noria se han acostumbrado al ya casi. Hoy, curiosamente, en el minuto 95, Cruz Azul pudo ganar la serie gracias a un remate de cabeza que Agustín Marchesín atajó en la línea. Fue una calca de aquel gol de Moisés Muñoz que, en la misma portería, venció a José de Jesús Corona y prácticamente le dio el título a las Águilas.
Video ¡Al fin! Jonathan Rodríguez marca el 1-0 para Cruz Azul
Cabecita le pegó con rencor a la pelota y venció a Agustín Marchesín.
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Esa icónica imagen, estandarte del americanismo en su paternidad sobre Cruz Azul, fue un momento heroico en su historia; pues bien, la Máquina se quedó a centímetros de igualarla, pero en esta ocasión no hubo un Alejandro Castro que desviara la pelota; estirado y con sus dos manos, Agustín Marchesín detuvo la pelota.
Será en otra ocasión para Cruz Azul. Los momentos importantes y heroicos siguen sin sonreirle a la Máquina y siguen siendo a favor de sus rivales.
