Con cuadro alterno, América vence al Puebla y casi amarra la cima del Clausura 2024

Con un cuadro alterno, pero con un Dilrosun encendido, América hizo válidos los pronósticos y derrotó 1-2 a un desastroso Puebla que no tuvo reacción y que se confirmó como el último lugar del Clausura 2024, torneo del que las Águilas están muy cerca de amarrar el liderato rumbo a la Liguilla de la Liga MX si Toluca no vence a Cruz Azul por dos goles en el duelo de este sábado en el Nemesio Diez.

Además, el equipo de Jardine llegó a 75 puntos en un año futbolístico, lo que significa una nueva marca para el cuadro azulcrema tras los 72 que estableció en el pasado el 'Tano' Ortíz.

El partido comenzó ríspido y con mucha pelea en mediocampo hasta que llegó el gol de la sorpresa. Ferrareis robó la pelota, se enfiló al área y tras recorrer 40 metros el brasileño recibió el esférico en el área, dio una buena media vuelta ante la tibieza de la marca y puso la pelota pegada al palo para el 1-0 en el Cuauhtémoc.

La gran polémica apareció sobre el minuto 21 cuando Javairo Dilrosun tomó la pelota en la banda, se subió a la 'moto' e hizo la diagonal al centro para quitarse un par de jugadores y luego dejarle el balón a Chava Reyes, quien metió un fierrazo a la portería de la 'Araña' Rodríguez para poner el 1-1 ante La Franja.

Sin embargo, la polémica apareció cuando se exhibió que el neerlandés le puso la asistencia a Reyes con la mano, pues al momento de caer, quiso poner la mano y ahí le dio un pase para el empate. El VAR no mandó la revisión y el gol contó para sopresa del Puebla.

El partido bajó el ritmo que tuvo en los primeros minutos y ambos equipos se maniataron, pero las Águilas quedaron cerca del segundo gol cuando Quiñones robó la pelota, se la dejó a Fidalgo, quien metió disparo raso y apenas abierto de la portería camotera.

Fue en el último suspiro de la primera parte cuando Javairo Dilrosun se volvió a inspirar para construir la remontada. El neerlandés volvió a tomar la pelota por el costado, hizo la diagonal al centro y ahora metió un gran pase filtrado para la llegada de Chava Reyes, quien aprovechó la mala marca, metió la pierna izquierda y firmó el 1-2 que hizo explotar el estadio.

Jardine decidió mandar la artillería pesada en el comienzo del segundo tiempo cuando Henry Martín y Diego Valdés entraron en lugar de Julián Quiñones y Álvaro Fidalgo, pero fue el Puebla el que estuvo cerca de igualar los cartones cuando Herrera tomó un rebote, lo prendió con violencia y la bola terminó abriendo para suerte de Óscar Jiménez.