Las caras de la derrota de un Barcelona que tocó fondo ante Valencia

Una pesadilla parece estar viviendo el Barcelona, de la que su último episodio se presentó en su propia casa, el Camp Nou, ante el irregular Valencia.

Los 'Blaugranas' venían de dos derrotas sufridas, una en Liga ante Real Sociedad y otra en Champions League ante Atlético que además le costó la eliminación del torneo continental, por lo que estaba casi obligado a sumar los tres puntos ante los 'Naranjeros'.

Sin embargo, sencillamente este no fue el día de los catalanes, quienes en los últimos juegos perdieron el tino que tanto les caracterizaba ante el arco rival.

Es tal la desesperación de los barcelonistas que se notaba a simple vista en sus acciones.

Pese a tener la posesión del juego, el Barcelona se vio abajo en el marcador con un autogol que le daba el 1-0 al Valencia.

La defensa, con futbolistas como Gerard Piqué, tampoco estaba libre de lamentos y en busca de explicaciones a su terrible bajón de juego.

La lista de figuras con la cabeza agachada tenía a todo el equipo 'culé'.

El mismo Messi era el claro ejemplo del no poder entender lo que sucedía en el campo.

El brasileño Neymar era otro jugador con un nivel por debajo de lo usual.

Incluso, el crack brasileño perdió la cabeza ante los rivales.

Con el segundo gol de los visitantes las dudas entre los barcelonistas aumentaban. ¿Qué era lo que sucedía?

El gol de Lionel Messi, su tan esperada e histórica anotación 500 como profesional, le daba esperanza a los locales.

Pero conforme seguían los minutos y las fallas se acumulaban el semblante de los locales volvía a ser de desolación.

Ya en los últimos minutos del partido, Piqué tuvo una clara oportunidad ante el portero valenciano para al menos salvar el empate, pero su tiro pasó a un lado y el lamento lo llevó a tirarse al césped.

Si bien es cierto que él es un defensa, el error fue garrafal y el catalán sabía lo que costaba dicha falla.

Poco después se escuchó el silbatazo final y el Valencia festejó en el Camp Nou.

Tristeza absoluta y una inexplicable sensación que no parece ser nueva entre el plantel del Barcelona, sino algo que se viene arrastrando desde hace semanas. La incógnita es si esta crisis 'culé' se mantendrá, al punto de marginarlos de más títulos.