Jesús Gil, el ‘pionero’ de Marbella

Un hombre irreverente y políticamente incorrecto, que usó Atlético de Madrid como trampolín al poder.

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Jesús Gil representaba una persona de éxito, un triunfador, alguien que supo tomar la oportunidad de un obstáculo.

El País

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Fundó su propio partido político bajo las siglas G.I.L., y logró ser alcalde de Marbella mezclando la promoción inmobiliaria, política y deporte.

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Un empresario que tuvo visión de ir más allá de sólo la construcción, que era su fuerte, y como las leyes siempre eran un impedimento, pensó en convertirse en ‘la ley’.

DENIS DOYLE/Associated Press

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Gil era socio activo del Atlético de Madrid y cuando hubo elecciones a la presidencia, sin dudarlo se postuló y fue elegido.

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El problema de Gil fue mezclar lo público con lo privado, pues ponía dinero de su bolsillo para pagar a jugadores y staff, pero también moviendo gente a su antojo.

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El club era lo que más le importaba y aun así había muchas irregularidades, el equipo portaba publicidad de Marbella en la playera, hasta hacerse de todas las acciones del club.

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Se apropió indebidamente del equipo y llevó a cabo una estafa al club, teniendo como cómplices a Enrique Cerezo y su hijo Miguel Ángel Gil.

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Al ganar tres Copas del Rey y una Liga mantuvo contenta a la afición, siendo ‘el héroe del pueblo’, pues sólo respondía a los intereses de la gente, no a un partido político.

PAUL WHITE/Associated Press

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Gil se topa con pared cuando el equipo baja a segunda división por diversos problemas legales.

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Lo que sí sabía hacer muy bien era la manipulación de los medios, pues entre la política, construcción y futbol, a la gente se le olvidó el incidente que lo puso en la cárcel.

Carlos de Andres/Cover/Getty Images

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Gil fue responsable de la muerte de 58 personas, tras el derrumbe de uno de sus edificios, en 1968 por no contar con los permisos de construcción.

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El club, al final de cuentas, fue investigado y descubrieron que el Atleti en segunda división, fue producto de una petición de Gil hacia los futbolistas que se dejaran perder para que volviera a la presidencia y les pudiera pagar.

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Tras un fallo cerebral, Gil murió de un paro cardiaco por consecuencia de dicho fallo. Se realizó la ceremonia de velación en el Estadio Vicente Calderón al cual acudieron 15mil personas.