Y es que el ‘Kaiser’, como era apodado, brilló en las Copas del Mundo. En 1966, en su primer partido en un Mundial, anotó un doblete en el triunfo por 5-0 ante Suiza. En ese mismo torneo marcó gol en Cuartos y Semifinales, fue titular en todos los partidos y llevó a su equipo hasta la Final, donde caerían ante el local Inglaterra.
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Cuatro años después, en México 1970, Franz Beckenbauer fue titular en seis de los siete partidos que jugó Alemania ese Mundial, anotando un gol en Cuartos de Final ante Inglaterra y más adelante en Semifinales dejando una imagen imborrable en las Semis ante Italia.
En pleno Estadio Azteca, en el duelo contra los italianos, Franz Beckenbauer se dislocó el hombro en un fuerte choque contra Giacinto Facchetti, un potente lateral italiano con el partido igualado a un gol. El ‘Kaiser’ decidió seguir para no dejar a su equipo con un hombre menos, pues su equipo ya había hecho los dos cambios que por entonces, permitía el reglamento.
Y así, con un trapo haciendo las veces de venda, jugó el resto de partido. Alemania cayó por 4-3 en unos tiempos extra de infarto y su equipo quedaría eliminado, pero la imagen de Beckenbauer quedó en la memoria de todos.
En la siguiente Copa Mundo en casa el crack alemán tendría su revancha. Fue capitán, jugó todos los partidos levantó el trofeo de vencedor frente a su gente tras vencer a la poderosa Holanda en la Final.
Por si fuera poco, 16 años después, esta vez desde el banquillo, el Kaiser lideró a la selección germana para ganar la Copa Mundial de Italia 1990, siendo apenas unos de los tres en la historia en lograr dicha gesta junto al recién fallecido Mario Zagallo y Didier Deschamps.
