Fútbol
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El ejemplo de Alemania al mundo: del fracaso y la vergüenza a la renovación y la gloria
Los germanos cambiaron sus jugadores y se adaptaron a un estilo diferente de juego con el que han alcanzado su mejor momento en los últimos 20 años.
Por:
TUDN
En menos de 20 años, Alemania entendió la necesidad de cambiar puntos de su estilo, de renovarse y de arriesgarse para alcanzar lo más alto sin pensar solamente en los resultados. Un camino largo y a veces triste, pero con una gran meta.
APEl Mundial de Francia 98 marcó el final de una era, luego de ser tres veces finalistas y una vez campeones en 1990. El triunfo de Croacia 3-0 en los cuartos de final cayó como un golpe frontal para Alemania.
APFiguras como Jurgen Klinsmann se despidieron del equipo, mientras que Alemania se cuestionaba sobre su actualidad y futuro, tras su segunda eliminación contra un equipo en el papel menos fuerte (en Estados Unidos 94 perdió contra Bulgaria).
APLa decepción de los alemanes se convirtió en la cara más común al ver como ese balompie se estancaba.
APEn 1999, la Copa Confederaciones fue un nuevo campanazo para Alemania, que con un estilo cada vez más en desuso y muchas caras nuevas quedó eliminado en primera fase.
MexsportLos nuevos talentos que llegaron a México para ese certamen estuvieron muy lejos del nivel deseado y en tres partidos apenas obtuvieron un triunfo y dos derrotas.
MexsportA pesar de que se vieron nuevas caras como Michael Ballack, la impotencia de los alemanes y su prematura eliminación dejaron ver a un equipo en su peor momento.
MexsportLa vergüenza se replicó en la Eurocopa del 2000, en donde cayeron eliminados en la primera ronda. Este fue el último torneo de Lothar Mattheus con Alemania.
APLos fanáticos alemanes perdieron la fe en su selección y la necesidad de un cambio se hizo inminente.
APEl cuerpo técnico de ese equipo quedó relegado y llegó a la direccion técnica Rudi Voeller, jugador talentoso de Alemania campeón en 1990.
APLas caras nuevas como Michael Ballack asumieron el liderazgo de una selección que se mantuvo poderosa gracias a su talla, pero que le imprimió toque a su fútbol. Fue una transformación que mezcló sangre joven y jugadores veteranos.
APAlemania fue finalista en Corea y Japón en 2002, pero perdió contra el Brasil de Ronaldo, Ronaldinho y Rivaldo, un equipo memorable en los últimos años.
APA pesar de la frustración, Alemania demostró que sin temerle al cambio se podían alcanzar logros importantes, en un proceso que se debía respetar.
APEl pueblo alemán apoyó a su selección a pesar de la derrota y le mostró su apoyo. La unidad es uno de los grandes ejemplos de este país para enfocarse a sus triunfos.
APLas caras jóvenes, mezcladas con jugadores experimentados, fueron consolidando el estilo de Alemania. Poderosa como es su tradición, pero con buen fútbol, esta selección europea buscó darle un título mundial a su gente en el evento de 2006.
APCon Jurgen Klinsmann como técnico y Joaquim Low como asistente, Alemania fue local en 2006 y consolidó un proceso de trabajo que venía desde el 2000.
APAlemania fue sorprendida en la semifinal por Italia, que fue campeón en 2006. En medio de una nueva decepción, el equipo teutón fue tercero en el Mundial y logró sus segundo podio consecutivo.
APLos alemanes reconocieron el esfuerzo de su selección. Aunque están acostumbrados a títulos y a una historia de gloria, los fanáticos entienden que son una fuerza poderosa para impulsar a su equipo. Klinsmann dejó la dirección técnica del equipo.
APLos directivos quisieron darle una continuidad al proceso y el asistente de Klinsmann asumió la dirección en 2006 tras el Mundial. Entender el estilo actual y darle un toque propio, que se ajuste a sus jugadores, fue clave para que aún esté vigente.
APEn 2008, Alemania fue finalista de la Eurocopa pero perdió contra España. Lo que en un resultado parece otro fracaso, fue un nuevo aprendizaje para los más jóvenes.
APLos alemanes reconocieron a los jugadores de su selección en medio del segundo lugar de la Eurocopa: de una eliminación hace ocho años a un subtítulo hubo cambios de caras y de estilo que los fanáticos valoraron.
APSudáfrica 2010 mostró a una versión de Alemania favorita para ser campeona del mundo: rápida, eficaz, compacta, organizada y con un proceso muy valioso.
APEl golpe de autoridad de Alemania llegó con la goleada 4-0 en los cuartos de final contra Argentina. Una generación de jóvenes aún le dieron un baile al equipo de Diego Maradona.
APLa semifinal tuvo otro nuevo golpe tras el triunfo de España 1-0 con gol de Carles Puyol. La tercera semifinal de los teutones les dio un nuevo aprendizaje tras caer de nuevo contra el que fue el campeón del mundo de esa edición en 2010.
APCon la experiencia de los jóvenes y otros más veteranos, Alemania demostró en 2014 que los procesos generan frutos, a pesar de que en medio de ellos haya derrotas. Este equipo fue contundente.
APAlemania fue una máquina impresionante, que incluso se dio el lujo de golear 7-1 al local Brasil y poner a Miroslav Klose con 16 goles como el máximo goleador en la historia de los mundiales.
APEn la final, el equipo alemán controló al mejor jugador del mundo, Lionel Messi, para imponerse sobre Argentina 1-0 en la final de Brasil 2014.
APEl punto más alto del proceso llegó con el título de campeón de Brasil 2014, volviendo a alzar el trofeo como el mejor del mundo luego de 24 años de espera, sequías y tristezas en medio de ese camino.
APEl técnico Joaquim Low, quien lidera el proceso hace 11 años y que está en el mismo hace 15 años, entendió la necesidad de renovación y decidió arriesgarse al llevar un equipo joven, sin veteranos, a la Copa Confederaciones.
MexsportLa denominada 'Baby Alemania' apenas tuvo a tres jugadores jóvenes de los que estuvieron en el título de Brasil 2014 y apostó a un equipo que se caracterizó por su unión y por tener el respaldo de los directivos y de la afición.
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