Fútbol

    Diego Maradona: "No me importa lo que haga Higuaín, que siga por su camino"

    El ex futbolista argentino se mostró diplomático y decidió no criticar a su compatriota por cambiar al equipo de sus amores en Italia por el archirrival.

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    Por:
    TUDN

    Diego Armando Maradona

    Imagen Getty Images
    Diego Armando Maradona

    El exjugador argentino Diego Armando Maradona, que cumple 56 años, aseguró en un vídeo dirigido a la hinchada del Nápoles que no le "importa lo que haga" su compatriota Gonzalo Higuaín, que marcó al club azul con la camiseta del Juventus.

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    Maradona agradeció a los napolitanos por las felicitaciones por su cumpleaños y fue tajante en sus declaraciones sobre Higuaín, al que deseó que "siga por su camino", y también sobre el actual equipo del Juventus, al que 'su' Nápoles le hubiera "metido cuatro".

    Diego Maradona cumple 56 años este 30 de octubre de 2016, con un recorrido glorioso en lo deportivo y en ocasiones controversial por su vida personal. Sin embargo, es un ídolo en Argentina y a nivel mundial.
    Su carrera comenzó en Argentinos Juniors y en su época fue el más joven debutante en el fútbol argentino el 20 de octubre de 1976, a sus 15 años. Desde ahí demostró su capacidad en la cancha. Allí estuvo hasta 1981 y su juego lo llevo incluso a ser postulado para el Mundial de Argentina-78, al que no sería convocado.
    Diego Maradona obtuvo el título en el primer Mundial Sub-20 con Argentina en 1979. Ese título representó para su carrera la oportunidad de demostrar lo que podría hacer por su país y el primer brillo con la albiceleste.
    Maradona cumpliría su sueño de jugar con Boca Juniors, al que llegó en 1981 y que le serviría como vitrina mundial. Gracias a su juego allí tendría la oportunidad de ser el líder de Argentina en la clasificación al Mundial de España-82. Con los 'xeneises' fue campeón en Argentina y su imagen sirvió para disputar amistosos alrededor del mundo que sirvieron para apoyar la situación económica del club.
    La participación de Argentina como campeón defensor en España-82 fue decepcionante y el equipo no pasó de la segunda fase. Maradona salió expulsado en su último partido en el Mundial, en un torneo discreto para él.
    El volante llegó al Barcelona de España en septiembre de 1982. Allí no tuvo brillo, a pesar de que fue campeón de Copa del Rey, Copa de la Liga y de Supercopa de España. Solo estuvo dos años en el club catalán.
    En 1984 llegó a Napoli para convertirse en estrella. El volante desplegó lo mejor de su fútbol en las seis temporadas que estuvo y ganó una Copa de la Uefa, dos títulos de Serie A, una Copa de Italia y una Supercopa de Italia.
    Maradona se convertiría en una leyenda en Italia, que hasta hoy se mantiene en la memoria colectiva de los hinchas del Napoli y del fútbol italiano.
    En medio de su mejor momento, Maradona fue capitán de Argentina en México-86. En este Mundial anotaría dos goles célebres en la historia del fútbol contra Inglaterra: uno es considerado el mejor de la historia, mientras que el otro es la recordada 'mano de Dios' con los que venció en cuartos de final 2-1.
    Diego Maradona lideraría a Argentina a su segundo título en un Mundial en México-86. El estrellato del '10' llegó a su punto más alto y su figura era ya considerado por muchos como la del mejor de la historia del fútbol.
    Maradona, afectado por una lesión, volvió a ser el eje de Argentina en Italia-90. Sin el mismo brillo de México-86, el equipo llegó a la final, donde cayó 1-0 contra Alemania y le tocaría conformarse con el subcampeonato.
    Escándalo mundial para Maradona, que fue arrestado en Italia por posesión de drogas. El hecho lo llevó a ser sancionado en el fútbol italiano, a su final en el paso por Napoli y a una dura caída.
    Maradona pasaría por Sevilla (1992/93) y Newells Old Boys (1993) sin mucho éxito antes de volver a jugar con la Selección de Argentina. El equipo albiceleste lo convocó para sus partidos de repechaje para Estados Unidos-94 y el '10' estuvo en ese Mundial, en el que cayeron en octavos de final 3-2 contra Rumania.
    Diego Maradona, que en 1994 dirigió al Deportivo Mandiyú y en 1995 al Racing, tuvo un último paso como jugador por Boca Juniors de 1995 a 1997, con un juego de nivel inferior al que lo llevó al estrellato y más como un emblema. Allí se retiraría del fútbol activo.
    En el 2000, Maradona se sometió a un tratamiento contra su adicción a las drogas en Cuba, en el que tuvo la compañía de su esposa Claudia Villafañe y de su representante Guillermo Coppola. Con ambos rompería sus respetivas relaciones posteriormente.
    Diego Maradon tendría su partido de despedida oficial en 2001, en medio de un evento que contó con estrellas del fútbol de todo el mundo. Con las camisetas de Argentina y de Boca Juniors le decía adiós a las canchas definitivamente.
    Maradona es un hincha declarado y apasionado de Boca Juniors e incluso tiene su propio palco en el estadio 'La Bombonera', en un amor que le ha transmitido a sus dos hijas Dalma y Gianinna.
    El amor por Maradona se ha convertido en un culto para muchos fanáticos. De hecho, existe una iglesia maradoniana en la que se le rinde tributo a la figura del llamado 'D10s'.
    El crack argentino ha dejado amigos alrededor del mundo. Desde Italia hasta cada país de América tiene colegas que le tienen aprecio personal, gracias al carisma que lo caracteriza.
    Maradon sería director técnico de Argentina desde 2008 y lo clasificaría al Mundial de Sudáfrica en 2010. Con Lionel Messi en la nómina, el equipo argentino llegaría hasta cuartos de final, en donde caerían goleados 4-0 por Alemania.
    A pesar de sus fuertes discusiones, Maradona en la actualidad tiene una relación con Rocío Oliva. Tras la separación de su esposa Claudia Villafañe, esta lo demandó por presunto fraude, estafa y malversación de patrimonio.
    Este es Diego Maradona, una figura reconocida a nivel mundial y que llega a sus 56 años contando historias y siempre dando de qué hablar.

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    Diego Maradona cumple 56 años este 30 de octubre de 2016, con un recorrido glorioso en lo deportivo y en ocasiones controversial por su vida personal. Sin embargo, es un ídolo en Argentina y a nivel mundial.

    "Os agradezco por vuestros pensamientos por mi cumpleaños, me llegan muchos mensajes, sobre todo de los napolitanos. Yo no traiciono, no me importa lo que haga Higuaín, siga por su camino. Ya no me importa", afirmó Maradona en un vídeo publicado en su cuenta de Facebook.

    "Estoy tranquilo porque yo nunca traicionaré la camiseta del Nápoles y mi corazón es napolitano", agregó.

    Diego Maradona de nuevo fue protagonista de las cámaras entre risas y polémicas, en un encuentro que a su alrededor tuvo otras grandes figuras del fútbol mundial.
    El argentino Diego Armando Maradona, los brasileños Ronaldinho y Cafú, el español Manuel Sanchís, Juan Sebastián Verón y el colombiano Faryd Mondragón son solo algunas de las glorias del fútbol mundial que se exhibieron este miércoles en Roma, en el Partido por la Paz, promovido por el papa Francisco.
    Maradona se reencontró con Juan Sebastián Verón, su compatriota con quien guardan rencillas dede que Diego dejó como suplente al volante activo en ese momento en el Mundial de Sudáfrica en octavos y en cuartos de final.
    Los dos futbolistas no han vuelto a tener una buena relación. Recientemente tras la dimisión de Gerardo Tata Martino como seleccionador de la albiceleste, Verón fue elegido por la Federación argentina para dar su opinión en la elección del nuevo cuerpo técnico, lo que no gustó a Maradona, que puso en duda sus competencias como directivo.
    Los dos futbolistas se evitaron a lo largo de todo el encuentro y hasta tuvieron una pequeña riña antes del descanso.
    Maradona y Verón tuvieron un altercado al finalizar la primera mitad. El hecho, particularmente fuera de lugar considerando que se trataba de un partido benéfico, reavivó rencillas pasadas que se remontan al Mundial de Sudáfrica de 2010.
    El "Pibe de Oro", a pesar de su discusión con Verón, disputó los 90 minutos del partido y recibió constantemente los cánticos de admiración de los más de 20.000 espectadores que acudieron al estadio de la capital italiana.
    Maradona y Totti jugaron en el mismo equipo y se enfrentaron a otra pareja de delanteros de lujo, formada por Ronaldinho y Kanouté.
    El partido reunió a los ídolos de varias generaciones de aficionados al fútbol, ya que también jugaron futbolistas en activo como Francesco Totti, el español Bojan Krkic, los argentinos Diego Perotti o Nicolás Burdisso.
    "Ha ido bien, lo dimos todo. La gente se divirtió, estamos felices. Nosotros seguiremos jugando para la paz en el mundo y para los niños, gracias Italia", fue el mensaje lanzado por Maradona al finalizar el encuentro.
    El encuentro terminó 4-3 con victoria del cuadro liderado por Ronaldinho que llevaba la camiseta blanca gracias a los goles de Kanouté, Bojan (de vaselina) y los argentinos Hernán Crespo y Fernando Cavenaghi.
    Para el cuadro azul, el de Maradona, marcaron Antonio Di Natale, Totti y el argentino Nicolás Burdisso.
    A pesar del incidente de Maradona, la idea del partido fue clara: "el fútbol es uno de los deportes más importantes del mundo y tenemos que utilizarlo para partidos como este, es importante acercarnos a los niños y enviar mensajes de paz", afirmó Perotti en el estadio Olímpico.
    Se cerró así un importante evento benéfico que logró reunir en el césped del Olímpico a más de 30 grandes leyendas del fútbol, que enviaron un mensaje de paz y unidad directo a todo el mundo.

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    Diego Maradona de nuevo fue protagonista de las cámaras entre risas y polémicas, en un encuentro que a su alrededor tuvo otras grandes figuras del fútbol mundial.

    El "Pibe de Oro" admitió que está triste por la derrota del conjunto napolitano ayer contra el Juventus en la Serie A (2-1, con gol decisivo de Higuaín) pero destacó que el Nápoles en el que jugó él le hubiera goleado sin dificultades a los "bianconeri".

    "Napolitanos, hoy cumplo 56 años y los cumplo con tristeza porque el Nápoles ha perdido contra el Juventus. Nosotros a este Juventus le hubiéramos metido 4 goles, que lo sepáis. Preguntad a vuestros padres si no es así. Este Juventus no es el equipo al que nos medíamos nosotros", dijo.

    Maradona jugó siete temporadas en el Nápoles en las que, con dos Scudettos, una Copa Uefa, una Supercopa italiana y una Copa Italia, se convirtió en un ídolo eterno de la afición.

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