Líderes políticos y empresariales en Cincinnati se muestran a la ofensiva con el objetivo de obtener un nuevo equipo en la MLS. Mientras que en la capital Columbus, los hinchas de otro club están en cambio a la defensiva.En unos cuantos años, Ohio podría tener dos equipos de la MLS. O sólo uno. O ninguno.El plan de crecimiento de la liga a 22 años se trastocó en octubre, cuando el dueño del Columbus Crew, uno de los 10 clubes fundadores de la liga, anunció que buscaría mudar el equipo a Austin, Texas.Como condición para no llevarse al club, el propietario Andrew Precourt exigió que se construyera un nuevo estadio, en una zona céntrica de Columbus. El alcalde de la ciudad Andrew Ginther, ha expresado su frustración ante la falta de compromiso de la liga y de Precourt para mantener el club en Columbus."Las grandes ciudades estadounidenses no entran en una guerra de ofertas para hacerse de equipos deportivos, lo que terminaría beneficiando a empresarios privados", dijo Ginther en un comunicado emitido de manera conjunta con la organización Columbus Partnership, después de reunirse el 15 de noviembre con Precourt y con el comisionado de la MLS Don Garber.El comunicado señaló que la situación es "desalentadora" para los aficionados del Crew, que han manifestado un "apoyo indudable" durante años.Ginther es demócrata, igual que su homólogo de Cincinnati, John Cranley, quien apoya las iniciativas para que una franquicia de la MLS se inaugure en esa ciudad.El FC Cincinnati milita ya en la USL, la segunda categoría del futbol en Estados Unidos, y ha registrado niveles sin precedente de asistencia a su estadio.Cranley predijo el lunes, durante una reunión del concejo de la ciudad, que el apoyo a la expansión de la liga hacia Cincinnati terminará siendo una decisión acertada, ante el crecimiento que muestra la MLS.El miércoles, funcionarios locales se comprometieron a financiar con unos 36 millones de dólares la infraestructura vial y otras obras que apoyen la edificación de un nuevo estadio para el equipo, que juega actualmente en el estadio de futbol americano de la Universidad de Cincinnati. Ese mismo día, los comisionados del condado de Hamilton accedieron a desembolsar 15 millones de dólares para construir un estacionamiento.Y los propietarios, encabezados por Carl Lindner III, han prometido cubrir con fondos privados la cuota de 150 millones de dólares para ingresar a la MLS y absorber el costo de unos 200 millones que implicaría la construcción del estadio.En cambio, el diario Columbus Dispatch informó que, ante la falta de proyectos inmediatos para financiar un nuevo estadio del Crew, se ha informado a las autoridades de la ciudad que podría realizarse la mudanza. En ese caso, Columbus sería tomada en cuenta para obtener un nuevo club en la siguiente ronda de expansión de la MLS.Entre las personas entusiasmadas por un equipo en Cincinnati figura Carlos Martino, de 74 años y originario de Argentina. Reside cerca de la ciudad y dice que ha asistido a varios encuentros del Mundial y del FC Cincinnati.Martino destacó el éxito del equipo de futbol, en comparación con las penurias recientes que han pasado los Reds en el beisbol y los Bengals en el futbol americano."Necesitamos a la MLS acá", dijo Martino. "Necesitamos un equipo ganador".