El camino de Rosberg hacia los puestos de privilegio fue tomando curso y en 2013 fue sexto en la clasificación general, en una temporada con dos victorias. Sin embargo, en las temporadas 2014 y 2015 mostró que era una carta seria al título al quedar en el segundo lugar. Crédito: Getty Images
El anhelado sueño de ser campeón se daría el pasado 27 de noviembre de 2016, 34 años después de que su padre se coronara. Políglota que pasa temporadas en la isla española de Ibiza y habla de forma correcta el castellano, supo ser paciente y en esta ocasión no dejó escapar su oportunidad. Crédito: Getty Images
Su buen desempeño le permitió erigirse en el tercer alemán, después de Michael Schumacher y de Sebastian Vettel, y el segundo hijo de campeón que gana el título, al modo que lo hiciera el inglés Damon Hill, vástago del bicampeón Graham Hill. Alemania encumbró a su tercer campeón, después de los siete títulos de Schumacher (1994 y 95, con Benetton; y entre 2000 y 2004, con Ferrari) y los cuatro de Sebastian Vettel (entre 2010 y 2013). Crédito: Getty Images
Esta es una decisión que sitúa a su hija Alaïa y a su mujer Vivian al frente de sus prioridades. "Ella (su esposa) entendió que éste era el gran año, nuestra oportunidad de conseguirlo, y creó el espacio para que yo pudiera recuperarme al cien por cien entre carrera y carrera, cuidando de nuestra hija cada noche, siguiendo adelante cuando las cosas se pusieron difíciles y anteponiendo el campeonato a todo lo demás". Crédito: Getty Images
Con este anuncio, Rosberg dice seguir a su corazón y apunta como anhelo "ejercer de padre y esposo" tras haber hecho realidad el sueño que persiguió los últimos 25 años. "Subí mi montaña y estoy en la cima, así que así está bien", valoró en un comunicado difundido a través de las redes sociales. Crédito: Getty Images