Incertidumbre, silencio, nervios, alegría, confianza, fiesta, sin fin de emociones este domingo en Guadalajara, en el centro futbolístico del país por un día, el Estadio Chivas. Consulta la ficha técnica de la Final de vuelta en Guadalajara.Mayoría rojiblanca como era de esperarse, minoría amarilla que en la explanada eran más que los que adentro se vieron, muchos sin boleto de ambas aficiones.La tarde comenzó temprano en la famosa "Fiesta Rebaño", alimentos y bebidas a granel, muchas ilusiones, mucha pasión.A ritmo de banda, la tambora, la carne asada, tortas ahogadas y mucho más, ambas aficiones convivían, adentro la fiesta del futbol esperaba.Ceremonia de primer nivel, himno nacional y unos anfitriones que desplegaron papelitos, banderas y globos, en la tribuna ya ganaba Chivas, en la cancha... aún faltaba.El gol llegó y el estadio explotó, festejo total rojiblanco que abucheaba cada vez que Gignac tocaba el balón y aplaudía cuando su equipo movía el esférico, oles, cánticos y palmas.Nervio cada vez que Tigres atacaba, miedo y confianza, bipolaridad en la grada y suspiros interpretados como una calma angelical.El segundo gol llegó y la gloria estaba más cerca, el júbilo en la grada era inexplicable, pero el mismo se silenció ante el descuento de Tigres y el nerviosismo apareció.Miedo, gritos, desesperación, todo se vivía en la grada, 5 minutos eternos para saborear una gloria que al fin llegó.Lágrimas, abrazos, palmadas y hasta besos se dieron, Chivas tenía la 12 estrella y el orgullo de una afición florecía de nuevo.La gloria rojiblanca llegó 11 años después con el sabor tan dulce de la victoria, del campeonato, de tantas emociones sin explicarse pero que salieron a flor de piel.Chivas es campeón del futbol mexicano y la gloria rojiblanca pinta a todo México. Especial: ¡Chivas levanta la 12!