Venus Williams cumplió su parte para conseguir otra final de hermanas en el Abierto de Australia, al derrotar el miércoles por 6-7(3), 6-2 y 6-3 sobre CoCo Vandeweghe, para convertirse en la jugadora de mayor edad en alcanzar la final del torneo en el formato actual de abiertos. Williams, de 36 años, vuelve a una final del Grand Slam por primera vez desde Wimbledon en 2009 y su primera en Australia desde 2003, cuando perdió ante su hermana pequeña, Serena.Ahora podría tener la oportunidad de vengarse si Serena Williams, ganadora de 22 majors, gana a Mirjana Lucic-Baroni para conseguir un hueco en la final. Williams arrojó su raqueta tras sentenciar un partido de semifinales de dos horas y 26 minutos con su cuarto match point, y se llevó las manos al rostro casi incrédula, antes de cruzar los brazos sobre su corazón. Después hizo una elegante pirueta sobre la cancha, con una gran sonrisa ante la ovación en pie del público."Todo el mundo tiene su momento de gloria", dijo Williams. "Quizá el mío lleva un tiempo en marcha. Me encantaría alargarlo. No tengo otra cosa que hacer, de modo que vamos a alargarlo". Williams no había llegado a una final del Grand Slam desde Wimbledon en 2009, la racha más larga entre finales de major para cualquier jugador en el formato de abiertos.También es la jugadora de mayor edad en alcanzar la final femenina de un major desde Martina Navratilova, que tenía 37 años y 258 días al llegar a la final de Wimbledon en 1994.Vandeweghe, de 25 años, estaba en semifinales de un major por primera vez y era la única semifinalista menor de 34 años. Había ascendido tras derrotar a la líder de la clasificación mundial, Angelique Kerber, y a la campeona de Roland Garros, la hispanovenezolana Garbiñe Muguruza.En su duelo con Williams, se anotó el tiebreaker del primer set. Pero Williams, ganadora de siete majors, remontó tras perder su primer set en el torneo y rompió cuatro veces el servicio de Vandeweghe, presionando a su compatriota."Significa mucho, sobre todo porque jugó muy bien. Jugó de forma increíble", dijo Williams. "Tuve que jugar a la defensiva todo el tiempo", añadió.Antes, Bob y Mike Bryan lograron el pase a la final para optar a su séptimo título de dobles en Australia, después de que la lluvia interrumpiera la semifinal por 7-6 (7-1) y 6-3 sobre los españoles Pablo Carreño y Guillermo García-López.