Serena Williams, tenista profesional de 36 años, admitió que estuvo al borde de la muerte al dar a luz a su primera hija, en septiembre pasado.En una entrevista para una cadena estadounidense, Williams confesó que se siente "afortunada" después de todo lo que ha vivido."Casi muero tras dar a luz a mi hija, Olympia. Todavía me considero una afortunada. Mi hija nació por una cesárea que se me practicó de emergencia porque su ritmo cardíaco bajó drásticamente durante las contracciones", admitió Williams.La ganadora de 23 torneos de Grand Slam reveló también que los días posteriores fueron de pesadilla, sobre todo por el padecimiento de una embolia pulmonar."Esto provocó una serie de complicaciones y tengo suerte de haber sobrevivido. Primero, la herida de mi césara se abrió por la tos intensa que tenía cuando sufrí la embolia. Los médicosencontraron entonces un gran hematoma en mi abdomen. Después volví al quirófano para evitar que los coágulos llegaran a mis pulmones. Cuando finalmente llegué a casa con mi familia, tuve que pasar las primeras seis semanas de maternidad en la cama."Si no fuera por sus cuidados profesionales, no estaría aquí ahora", concluyó Williams.La laureada deportista está casada con el empresario Alexis Ohanian y dio a luz a inicios de septiembre pasado. Serena Williams regresó a la actividad profesional en el deporte blanco hace unos días en un partido de la Copa Federación después de más de un año sin competir para la ex número 1 del mundo.