"Mis aspiraciones son las mejores. Estar en el podium y poderle dar una medalla a mi país sería lo mejor. Lo primordial es enfocarme en combate tras combate, así como me decía mi entrenador, que en paz descanse, Francisco Bonilla.
"Nos decía que primero la primer pelea, si no ganas la primer pelea, ya, se acabó todo para ti, no tienes otra. Aquí no son clavados, no es futbol en donde tienen hasta repechaje. Aquí es boxeo y es lo primero y si no lo pasas se acabó tu paso a las medallas", reconoció en entrevista con Adriana Monsalve y Geo González.
Tuvieron que pasar 13 años para que Rogelio Romero cumpliera con su objetivo y asistir a una justa olímpica, sueño que este miércoles materializó al subir al encordado de la Arena Kokugikan, sede espiritual del sumo, quien en su estreno dio la primera victoria para México en este deporte.
"Quiero mejorar como boxeador, es lo que más quiero, superarme. Mi mayor sueño siempre han sido los Juegos Olímpicos, pero qué mejor que ser campeón mundial de peso semipesado. Me gustaría ir por esa conquista.
"Yo me decidí por esto porque mi papá me platicaba que campeones mundiales hay muchos, ahora creo que cualquiera puede llegar a un campeonato de esos. Campeón olímpico de la categoría sólo va a haber uno, siento que es más complicado. Siendo el campeón olímpico llegas fácilmente a ser campeón mundial", aceptó.
Romero peleará este viernes 30 de julio a las 05:06 horas (tiempo del Centro de México) ante Arlén López; el vencedor puede amarrar medalla de bronce.
