Sin mayores dificultades, Atlanta derrotó a los Giants en duelo de lunes por la noche

Por primera vez en esta temporada, los Atlanta Falcons hilvanaron victorias consecutivas al derrotar 23-20 a los New York Giants en el juego de Monday Night Fooball que puso fin a la Semana 7 de la NFL.

El encuentro fue un mano a mano entre dos receptores Top 5 de la NFL y tanto Julio Jones como Odell Beckham Jr respondieron, aunque no con el protagonismo esperado en el marcador. El QB Matt Ryan terminó la noche con 379 yardas y 2 TDs, además de conseguir su sexto triunfo en un partido de Lunes por la noche.

El juego comenzó con muy bajo nivel entre ambas ofensivas que batallaban demasiado para funcionar y contener el balón. Luego de tres despejes de cada equipo y un primer cuarto que se esfumó sin puntos, tuvimos la primera anotación de la noche.

Atlanta pegó primero con una jugada grande donde Matt Ryan conectó pase de 47 yardas con Marvin Hall para adelantarse 7-0 a la mitad del segundo cuarto. Los Giants tuvieron su primer ataque exitoso llegando al campo de los Falcons pero solamente pudieron sacar 3 puntos, tras tener el ovoide en 11 jugadas, con patada de gol de campo de Aldrick Rosas.

El italiano Giorgio Tavecchio metió una patada de 40 yardas para recuperar la ventaja de 7 puntos de los Halcones justo antes del medio tiempo. El tercer periodo arrancó con par de errores por bando. Primero Gigantes falló un intento de cuarta y luego Julio Jones perdió un balón en fumble.

Nueva York se volvió a acercar con el segundo FG de Rosas de la noche pero, en su inmediata posesión, Atlanta retomó el liderato con otro largo gol de campo de Tavecchio ahora de 50 yardas.

Los Giants tuvieron en Odell Beckham a su mejor amenaza por arriba, acumulando 143 yardas esta noche -para superar las 5 mil en su carrera- y un touchdown al final del juego. Por parte de Falcons, Julio Jones fue de nueva cuenta la mejor arma por aire de Matt Ryan con 9 recepciones y 104 yardas aunque otra vez no anotó.

En el último periodo llegó otro touchdown para los Falcons con una escapada terrestre de Tevin Coleman 30 yardas hasta las diagonales para acercar el objetivo de volver a ganar en casa. Los Giants lograron un touchdown en una ofensiva donde Beckham fue importante y culminó con un acarreo anotador del novato sensación RB Saquon Barkley.

Al final Atlanta consumó el reloj en un drive largo que amarró la W de los locales, su tercera del año, con otro gol de campo larguísimo de Tavecchio en patada de 56 yardas. Los Giants todavía anotaron un TD a través de Beckham en una ofensiva desesperada más conversión con Barkley, pero acabaron resignados a perder contra los Falcons, que vivieron su quinto juego en el impresionante Mercedes-Benz Stadium, casa del Super Bowl LIII.

Con el triunfo, Atlanta (3-4) recupera cierto ánimo respecto a un posible regreso hacia los playoffs justo en la semana que se van de descanso, mientras los Giants (1-6) son, junto a San Francisco, los peores equipos de la Conferencia Nacional en el fondo de la NFC Este.